La Dirección General de Consumo detecta indicios de 'dinero negro' en la mayoría de las empresas a las que sanciona, una situación que va a comunicado a la Agencia Tributaria para que pueda poner en marcha los correspondientes controles, según ha desvelado el responsable del citado departamento, Félix Alonso. Esta iniciativa forma parte de una batería de medidas que se van a poner en marcha durante este ejercicio, a las que se suma un barrido para detectar posibles fraudes en las ofertas de las empresas eléctricas, controles sobre los aceites que se comercializan en las islas tras haber detectado en diferentes lotes de marcas conocidas que la calidad del producto es inferior a la que se anuncia, o un aumento de la vigilancia sobre la venta de coches de segunda mano o sobre entidades no bancarias que conceden créditos con intereses especialmente altos. Y a ello se suma otra novedad: a partir de ahora se va a dar a conocer el nombre de las empresas con faltas graves y muy graves, de forma que a la sanción económica se va a sumar la reputacional.

La primera de estas iniciativas va a dar lugar a la petición de una reunión por parte de responsables de Consumo con representantes de la Agencia Tributaria. Según señala Félix Alonso, los inspectores de consumo, al realizar sus controles, están detectando indicios de irregularidades fiscales y pagos 'en negro', como la no aplicación del IVA. Y además se trata de situaciones extendidas, dado que alcanzan a la "mayoría" de los negocios a los que se aplica alguna sanción por detectar faltas.

Pero éste no es el único frente abierto actualmente por el citado departamento autonómico. Tras analizar 22 lotes de aceite de oliva que se comercializan en Balears, en 13 casos se han detectado deficiencias graves relacionadas con la calidad del producto, al ser de categoría inferior a la que aparece en el etiquetado, en algunos casos incluso lampante, la más baja de la gama. Un aspecto a destacar: se trata de marcas conocidas, una de ellas de las islas y doce nacionales, dos de estas últimas 'blancas' ofrecidas en las cadenas de supermercados y grandes superficies.

Un punto sobre el que el director general de Consumo insiste es en que esas deficiencias no suponen un riesgo para la salud del consumidor, pero sí son un fraude dado que la calidad real es inferior a aquella por la que se paga.

La mayor parte de estos trece expedientes se encuentran en la fase de los contraanálisis que pueden reclamar las empresas afectadas para que se confirmen los resultados del primero.

En este punto es conveniente señalar otra de las novedades impulsadas este año por Consumo: a partir de ahora, las sanciones por faltas graves y muy graves van a ir acompañadas, además de una cuantía económica, por la publicación del nombre del infractor. El objetivo es que a la multa en euros, que en muchos casos no es lo bastante alta como para que el fraude no salga rentable, se sume el coste reputacional. Hay que tener en cuenta que muchas de las sanciones que Consumo aplica van dirigidas a grandes y conocidas empresas, como entidades financieras, compañías aéreas, rent a car, eléctricas o primeras marcas de alimentación.

En el marco de estas grandes empresas, una de las campañas que Consumo pone ahora en marcha es un 'barrido' sobre las eléctricas para detectar fraudes relacionados con publicidad engañosa, en la que no se da información veraz al cliente sobre el precio final que va a tener el servicio que contrata. Esta iniciativa nace de una denuncia presentada por la asociación de consumidores Facua contra Endesa, pero que va a dar lugar a la aplicación de controles sobre la totalidad de las empresas del sector, según destaca Alonso.

Agencias inmobiliarias

También se ha planificado una campaña de controles vinculada a las agencias inmobiliarias y la gentrificación de algunos barrios de poblaciones isleñas (un ejemplo claro es Santa Catalina, en Palma), con la marcha de la población tradicional y su sustitución por extranjeros. El objetivo es obligar a que estas empresas oferten sus viviendas en venta o en alquiler, además de en idiomas extranjeros, también en español o en catalán tal y como exige la ley, para evitar que solo puedan acceder a ellas personas de otros países.

La lista incluye comprobaciones en el mercado de vehículos de segunda mano para asegurar que incluyen un plazo de garantía y la vigilancia de entidades que hacen préstamos para ver que no hay estafas, tras detectar un posible caso.

Los frentes de Consumo

Fraude en la calidad del aceite de oliva de primeras marcas

Se analizaron 22 lotes de aceite de oliva y en 13 de ellos la calidad del producto era inferior a la que aparecía en el etiquetado.

Coches de segunda mano sin garantía en caso de fallos

Se van a aplicar controles para comprobar que la compraventa de coches de segunda mano incluye un periodo de garantía.

Préstamos con intereses muy superiores a los del mercado

El objetivo es determinar si se dan casos en los que se puede caer en la estafa, tras haber detectado una situación de este tipo.

Inmobiliarias que solo ofrecen sus viviendas a extranjeros

Se va a exigir que sus webs incluyan las ofertas para compra o alquiler en español o catalán, y no únicamente en lenguas extranjeras.

Eléctricas con ofertas en las que no se informa del precio final

El 'barrido' entre eléctricas busca ofertas en las que no aparezca el precio final del servicio que se contrata, tras una denuncia de Facua.

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