La presidenta del Govern, Francina Armengol, se ha comprometido hoy a trabajar para mejorar el nivel de vida de los ciudadanos de Baleares, reforzar los servicios públicos, pensando sobre todo en las personas mayores, y poner los medios necesarios para generar un mayor crecimiento en la calidad de la enseñanza.

Estos han sido los tres primeros compromisos de Govern que expresó ayer en su discurso de fin de año, emitido esta noche por la televisión autonómica IB3 y grabado en sa Llonja, cuando van a cumplirse 600 años del inicio de las obras de la joya mallorquina del gótico civil.

La presidenta recordó las leyes pioneras contra el cambio climático, la contaminación y contra la generación insostenible de residuos que Balears ha aprobado. "Pero debemos hacer más", subrayó. "Las instituciones tenemos la responsabilidad de aliarnos para preservar nuestro litoral, nuestros bosques y nuestra biodiversidad". Y añadió: "Y los ciudadanos tenemos también el reto de hacer que cada gesto individual cuente".

Armengol anunció que el Govern empezará el año "impulsando nuevas medidas para facilitar el acceso a la vivienda o para mejorar la calidad de nuestro turismo"; "ampliaremos la protección de nuestro territorio y aceleraremos la transición hacia energías limpias".

La presidenta no se olvidó de sus reivindicaciones al Gobierno. "Reclamaremos un nuevo modelo de financiación que sea capaz de garantizar que nuestra generosidad sea correspondida con un reparto más justo de los fondos públicos".

Armengol se refirió también a un compromiso "irrenunciable" del Govern: "Hacer que nuestra tierra sea socialmente, económicamente y ambientalmente sostenible".

Y eso pasa, destacó la presidenta, "por una Mallorca, una Menorca, una Eivissa y una Formentera donde la prosperidad económica signifique siempre mejores salarios y oportunidades", "que deje para siempre en el pasado lacras como la de la violencia machista.