La crítica velada a Més del vicepresidente del Govern Juan Pedro Yllanes, de resucitar "el debate entre forasteros y mallorquines, que yo que lo soy creía superado", por su rechazo al plus de 22.000 euros para los altos cargos traídos de otras regiones, ha indignado a los econacionalistas. "Querer desviar el debate por parte de Yllanes, acusándonos a Més y a El Pi de 'etnicistas', es de tanta demagogia manipuladora y poca catadura moral que le coloca a la altura de Vox". Así reaccionó el portavoz adjunto de Més per Mallorca, Josep Ferrà, preguntado sobre la polémica. "Es como si yo le dijera que Podemos son unos expoliadores y saqueadores de los recursos de los baleares, al nivel de Hernán Cortés".

A Ferrà le "duele especialmente que alguien insinúe" que Més "es 'etnicista', cuando sé de primera mano que este es un tema muy sensible para gente como Jaume Font o Pep Castells, ambos con vínculos muy directos con la península. Y me duele porque Més per Mallorca ha sido el motor en políticas sociales de estas islas en todas las instituciones, especialmente en el Govern; y me duele porque entre nuestros cargos y militantes hay muchísimas personas de origen peninsular, puede que muchas más que en otras formaciones".

"Y a mí -prosiguió Ferrà- me duele especialmente cuando soy hijo de emigrante que residió veinte años en la otra punta del Atlántico y he sido trabajador en el área de inmigración y extranjería de un sindicato".

El número 2 de Més destaca que Balears "es una comunidad mal financiada. ¿Hemos de pagar encima los gastos de 'peninsularidad'?", se pregunta. Por si fuera poco, añade, los 6 altos cargos podemitas venidos de otras autonomías "no tributan aquí, otro efecto colateral". Ferrà recuerda que hasta 2011 el sobresueldo era solo para compensar a pitiusos y menorquines, y reprocha a Podemos que se aferre a un plus ampliado por el líder del PP Biel Company, "que hizo un trato de favor a una persona de su confianza para traerlo de Madrid, al estilo 'hágase' de Jaume Matas". "Creo y defiendo que toda persona puede ocupar un cargo en el Govern balear, independientemente de dónde sea y de cuál sea su residencia, pero es lógico que o bien este trabajador traslade su residencia a Mallorca, o bien mantenga la suya si quiere, pero no a costa de dietas de la Administración balear", zanjó Ferrà.

"Absurdo y provinciano"

"Es un complemento absurdo, no hay ninguna comunidad que pague a ciudadanos de Balears por formar parte de su gobierno autonómico", sentenció por su parte el diputado Josep Castells, de Més per Menorca. A su juicio, estar a favor de este complemento "denota una mentalidad provinciana y periférica, de gente de piensa que por venir a Balears se ha de cobrar un plus".