Diario de Mallorca

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Entrevista

Domingo Bonnín: "Si a los pastores les pagan por los lobos, ¿por qué no a nosotros por los delfines?"

"No hay relevo generacional, es de raza" - "Las principales enemigas de la posidonia son las depuradoras, las desaladoras y las potabilizadoras"

P En poco más de un mes ha sido elegido patrón mayor de la cofradía de Palma

R Hay un refrán mallorquín que dice que la cera se recoge cuando cae. Siempre he trabajado en segunda fila y ya era miembro del cabildo (la comisión ejecutiva, el órgano de gobierno) de nuestra cofradía (de Palma), que se creó en el año 1350. Se han fijado en mí como relevo natural. Si hubieran seguido Joan Cànaves (en la Federación) yRafel Mas (en la cofradía de Palma), no me hubiera presentado. Todo ha caído de manera natural. También habrá influido mi forma de ser. Si fuera un tarambana, no se hubieran fijado en mí.

P ¿Cuáles son las principales artes pesqueras de las islas?

R Las artes menores que practican las embarcaciones de esloras no superiores a los doce metros, de entre ocho y diez de media, el arrastre y las que aún se dedican al cerco que originariamente vinieron de la península.

P ¿Cuántas personas se dedican a esta actividad?

R Unas 445 en invierno y 565 en verano. Estas cifras, de 2018, incluyen a los pescadores, los mecánicos, los rederos y los patrones.

P ¿Cuál es el número de embarcaciones?

R Nuestra flota suma 265 barcas de artes menores, cinco de cerco, todas ellas en Palma, y 35 de arrastre, 22 de ellas en Mallorca, 6 en Menorca, 5 en Eivissa y 2 en Formentera. Es una flota pequeña y muy dispersa, de ahí el buen estado de nuestros recursos pesqueros. No hay ningún punto del litoral balear al que se pueda atribuir su sobreexplotación al sector pesquero.

P ¿No es un punto de vista un tanto corporativista?

R Una institución oficial, no te diré cuál, ha estimado que la flota de recreo de Balears, la que está compuesta por todo aquello que navega y está matriculado, la conforman 30.000 embarcaciones. Y hay 14.000 licencias de pesca recreativa para hacerlo desde embarcaciones y 54.000 de pesca recreativa individual desde la costa. Con esto creo que te respondo.

P ¿Cuál es su volumen de capturas anual?

R Unas tres mil toneladas que generan un volumen de negocio de 21 millones de euros. Estas cifras no han variado mucho pese a que la flota sí lo ha hecho. El 70% de las capturas proceden de los barcos de arrastre y 2.100 toneladas del total se pescan en Mallorca.

P ¿Ha disminuido mucho la flota en los últimos años?

R No tengo cifras pero te diré que en algún puerto en el que en los años ochenta había veinticuatro barcos de arrastre, hoy hay tan solo tres.

P ¿Puede subsistir el sector con sus números actuales?

R Estamos en el umbral crítico, está infradimensionado. Si pasa cualquier cosa, lo pasaríamos mal.

P ¿Cómo qué?

R Un aumento del precio del gasoil o una normativa que reduzca las horas de pesca podría hacernos desaparecer. Y hay que tener en cuenta que los pescadores tienen el patrimonio en sus barcas y que sus rentas proceden del mar.

P ¿Las generaciones jóvenes quieren dedicarse a la pesca? ¿Hay relevo generacional?

R Ese es otro problema. Las condiciones son muy duras. Frío y agua en invierno. Calor y humedad en verano...

P ¿Cuáles son los horarios más habituales de sus jornadas?

R Los arrastreros faenan de cinco de la mañana a cinco de la tarde. Los de cerco igual, aunque si lo hacen de noche invierten los horarios: empiezan a las cinco de la tarde y acaban de madrugada. Las artes menores no tienen horario.

P Póngame un ejemplo.

R Con la langosta y la llampuga hay que estar en el sitio de pesca cuando sale el sol. Y en verano a las cinco y media de la mañana ya es de día allí en medio. Por eso hay que ponerse el despertador en torno a las tres y media para llegar al sitio de faena a esa hora. Entre siete y ocho meses al año nos despertamos a esa hora. Es un trabajo duro y peligroso, pero ya lo tenemos asumido. Las aplicaciones para mirar la meteorología nos han facilitado mucho la vida.

P Es vocacional...

R Sí y eso no cambiará. Mi hermano y yo (las dos únicas personas que faenan en su barca de artes menores) tenemos tres hijas, por lo que cuando nosotros nos jubilemos se acabará la tradición.

P ¿No hay ninguna mujer que se dedique a la pesca?

R Sí, pero son pocas y, la más conocida de ellas, patronea una barca que se dedica a la pesca turismo (actividad reglada que consiste en ofrecer a los turistas un remedo de jornada pesquera) en la que se han adaptado los horarios y no se calan todas las redes.

P Entonces, no hay relevo...

R Creo que el relevo generacional se ha convertido de hecho en un relevo de raza. Cameruneses, senegaleses y marroquíes son los que han ayudado a mantener nuestra flota pesquera. Si no estuvieran ellos aquí, tendríamos un problema.

P Fue elegido presidente de los pescadores de Balears el sábado de la semana pasada, ¿qué es lo que más le preocupa en este inicio de mandato?

R El cargo conlleva un montón de papeleo y aún me estoy poniendo al día, pero lo que más me preocupa es la nueva normativa comunitaria que regulará el esfuerzo pesquero a partir del próximo 1 de enero.

P ¿En qué consiste?

R En reducir la actividad pesquera un mes al año, periodo por el que los pescadores perciben indemnizaciones durante quince días. Se puede parar durante un mes de forma continuada o hacerlo un día a la semana hasta sumar treinta. En Mallorca se hace así, pero cada isla decide cómo hacerlo en función de sus intereses. Hemos tenido la santa suerte de que el año pasado ya lo hicimos de motu proprio y nos permitirán que continuemos así el próximo ejercicio.

P ¿Cuál es entonces el principal problema del sector?

R El hecho insular nos penaliza mucho. Pese a que tenemos convenios ventajosos con la distribuidora, pagamos el gasoil más caro que en la península. Las normativas comunitarias son generalistas y deberían contemplar compensaciones por el hecho insular. Y no necesariamente con dinero.

P ¿Cuáles son las organizaciones ecologistas que, en opinión del sector, son más beligerantes con sus intereses?

R Nos sentimos perseguidos por Oceana y Greenpeace, que atacan sobre todo a los arrastreros y lo hacen por motivos ideológicos.

P ¿Por qué?

R Porque la flota de arrastre es la que más controlada está. Ningún arrastrero puede salir a faenar sin su caja azul, similar a la caja negra de los aviones, que no se puede manipular y que controla que no pesques sobre praderas de posidonia, por ejemplo. Además, contrariamente a lo que se dice, la red no se arrastra sobre el fondo, se desliza para evitar perderla si se queda enganchada en las rocas. No encontrarás a ningún payés que te diga que arar la tierra con un tractor la perjudique.

P ¿Qué pasaría si se prohibiera el arrastre?

R Que no comeríamos ni gambas, ni gerret, ni salmonetes ni merluza. Si te cargas el arrastre, te cargas el sector. Te recuerdo que es el responsable del 70% de las capturas.

P ¿Cuáles son las especies más rentables para cada arte?

R Para el cerco el boquerón, para el arrastre la gamba roja y para artes menores la langosta, sin duda.

P ¿Qué opina de las medidas de protección de la posidonia?

R La posidonia es indispensable para el sector pesquero. Y sus principales enemigas son las depuradoras, las desaladoras y las potabilizadoras, que por ello también están matando a las embarcaciones pequeñas.

P ¿Y los fondeos de las embarcaciones?

R Si las praderas sobre las que se arroja el ancla están en mal estado, sí les perjudica. Otra cosa es que estén bien. Tal y cómo demostraron algunas organizaciones ecologistas con la Caulerpa taxifolia (especie invasora popularmente conocida como alga asesina), las anclas que arrancan posidonia pueden ayudar a diseminarla y a colonizar otros fondos si la planta goza de buena salud.

P ¿Se ha adaptado el sector a esta nueva era digital?

R Si vieras el puente de mando de un arrastrero creerías que estás a bordo de un cohete espacial. El sector está muy al día con las nuevas tecnologías.

P Qué le parece la pesca turismo?

R Que genera unos ingresos complementarios muy buenos para el sector pero que adolece de una normativa algo restrictiva que no propicia la incorporación de más embarcaciones. Pero no desvirtuaría tanto la actividad pesquera real y lo convertiría en turismo de aventura.

P ¿Siguen reclamando indemnizaciones por los perjuicios que les causan los delfines?

R (Se remueve en su asiento) Sí, es nuestro gran caballo de batalla. Si les indemnizan a los pastores en la península por el lobo, ¿por qué no nos compensan a nosotros por los delfines?

P ¿Tan dañinos son?

R El delfín mular es un animal muy inteligente que puede actuar en cualquier parte, a tres metros de agua y a millas de la costa. Rompe las redes y se lleva todo el pescado. No es raro que destroce cuarenta redes sepieras por temporadas arramblando con todos los salmonetes o variadas que encuentre en su interior.

P ¿Es cierto que el atún rojo, tras años de restricciones pesqueras, se ha convertido en una plaga en el Mediterráneo?

R Sí, hay muchos y al arte de cerco le está haciendo mucho daño. Se trata de un depredador nato que come mucha sardina, jurel y boquerón y a los cerqueros les está causando muchos perjuicios. Tiene un potencial de embestida temible. Si lo hiciera en tierra y te encontrara en medio, te partiría por la mitad. Aquí lo pescan las barcas de artes menores con muchas restricciones.

P Ya para acabar, cuénteme alguna anécdota vivida mientras faenaba.

R Estaba pescando a principios de los noventa con un arrastrero en el Port del Francés, 50 millas al sur, cuando sacamos un misil sin espoleta de unos 500 kilos a 700 metros de profundidad que debió soltar un piloto en problemas que se dirigía al Golfo Pérsico. Lo trajimos a Palma donde generó mucha expectación y Comandancia Militar se hizo cargo de la pieza.

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