Las primeras elecciones generales de 1977 pusieron el punto final a la larga dictadura de Franco, pero no fue hasta dos años después, en 1979, cuando se celebraron los comicios que abrieron el camino de la normalización democrática en los municipios del país. Así, este año se cumple el 40 aniversario de los primeros ayuntamientos democráticos, cuatro décadas que fueron celebradas ayer en el Club DIARIO de MALLORCA con un acto de reconocimiento a quienes han formado parte de la historia municipal en este tiempo.

El homenaje, impulsado por Prensa Ibérica y Grupo Zeta, con la colaboración de la Federación Española de Municipios y Provincias, y organizado por DIARIO de MALLORCA en colaboración con el Consell y la empresa de aguas FACSA, contó con la presencia de alcaldes y regidores de los municipios de Mallorca en estos 40 años, con especial relevancia en el caso de los primeros alcaldes democráticos de 1979. Ellos, los que hace cuatro décadas eran elegidos en las urnas por primera vez tras la dictadura para llevar las riendas de las instituciones más próximas a los ciudadanos, recibieron un reconocimiento especial, con la entrega de una reproducción de la portada de este periódico que informaba de los resultados de las elecciones.

Así, al escenario del Club subieron a recibir este reconocimiento los primeros alcaldes de Alaró, Francisco Rosselló; Andratx, Onofre Alemany; Artà, Jaime Morey; Binissalem, Antonio Amengual; Capdepera, Salvador Moll; Felanitx, Pedro Mesquida; Llucmajor, Miquel Clar; Marratxí, Guillermo Vidal; Palma, Ramon Aguiló; Puigpunyent, Antonio Colom; Santa Maria, Joaquin Morales y Valldemossa, Juan Muntaner.

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Así ha sido el acto de homenaje a 40 años de ayuntamientos democráticos

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Rosselló fue el encargado de agradecer en nombre de todos ellos este reconocimiento. El exalcalde de Alaró sostuvo que "la democracia ha servido sobre todo para acercar los ayuntamientos al pueblo", unas instituciones que hace 40 años no estaban "preparadas" para funcionar en democracia. "Llegamos con mucha ilusión, pero también con mucha incertidumbre e inseguridad", recordó Rosselló quien resaltó los avances y los logros en todos estos años. "La sociedad ha cambiado y la política y las instituciones han de adaptarse a los tiempos, pero lo que nunca puede cambiar es que los ayuntamientos estén al servicio de nuestros pueblos", concluyó Rosselló.

El acto, presentado por Mercé Marrero y con la intervención musical de Posidonia, comenzó con la bienvenida de la directora de este periódico, Maria Ferrer, quien recordó las diferencias entre aquellos primeros ayuntamientos y la actualidad. "El balance general es positivo", sostuvo Ferrer quien consideró que "en un momento de crisis y bloqueo político" como el que se vive en el Estado son un ejemplo los acuerdos que caracterizan la política municipal. "La cultura del pacto y consenso ha sido imprescindible en los gobiernos locales y debería de servir como ejemplo en otros niveles", concluyó.

Antes del homenaje la presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, resaltó el papel en el "proceso de consolidación democrática" de los ayuntamientos que juegan "un papel clave en la política de proximidad". Cladera resaltó la necesidad de contar con ayuntamientos "técnicamente competentes y fuertes políticamente para ofrecer los servicios" a los ciudadanos, para lo cual es preciso "dotarlos" adecuadamente. En este sentido consideró que "el gran caballo de batalla" que exige una solución rápida es que el próximo Gobierno de Pedro Sánchez acabe con la regla de gasto de la Ley Montoro, que impide a los ayuntamientos disponer de sus ahorros. Junto a ello, defendió la necesidad de una nueva Ley de Consells Insulars, como instituciones supramunicipales.