Los trabajadores que reciben un salario inferior a los 1.047 euros mensuales brutos se han disparado en Balears, y al cierre del pasado año alcanzaban los 73.000, según se desprende de la Encuesta de Población Activa (EPA), lo que supone un incremento de un 20% respecto a la cifra de 2017. Según señala el sindicato CC OO, la explicación de este fenómeno se encuentra principalmente en la precariedad que actualmente impera en las incorporaciones a las empresas y que además está abriendo una brecha en las retribuciones de los empleados con mayor antigüedad frente a los que han entrado más recientemente.

La EPA muestra los importantes claroscuros existentes en el mercado laboral de las islas. Porque la cifra media de asalariados al cierre del pasado año fue en el archipiélago de 455.700 con un crecimiento del 6,9% frente a 2017, mientras que el salario medio se cifró en los 1.862 euros brutos mensuales, lo que supone un alza anual del 3,6%, claramente por encima de la inflación y ayudada por convenios como el de hostelería.

Pero esta encuesta desvela también que la mejoría citada se salda con fuertes desigualdades. Porque el Instituto Nacional de Estadística (INE) cifra en 33.900 los asalariados de Balears que perciben menos de 749 euros brutos mensuales (básicamente empleados a jornada reducida), lo que supone que este colectivo crece un 37%, y en 39.100 los que cobran entre 749 y menos de 1.047 euros, en este caso con un alza del 8,3%. Ambos grupos suman los 73.000 empleados antes señalados.

Al mismo tiempo, aquellos asalariados que cobran más de 3.442 euros brutos mensuales alcanzan en Balears los 35.600, y en este caso su cifra alcanza un aumento espectacular de un 50,8%, lo que refleja un fuerte impulso de los cargos directivos en las empresas.

Acceso precario

La secretaria de Empleo de CC OO en las islas, Yolanda Calvo, señala estos datos como el reflejo de que de la crisis se ha salido a dos velocidades, pero además subraya que una de las causas es la precariedad que los empresarios están imponiendo a la hora de que las personas accedan a un puesto de trabajo. Eso tiene un impacto especialmente destacado entre los jóvenes, pero también para aquellos que perdieron su empleo y ahora han logrado reincorporarse al mercado laboral.

Esos bajos salarios iniciales han provocado que se haya abierto una brecha apreciable entre lo que perciben los empleados con mayor antigüedad y los recién llegados, pero se subraya que ésta se produce por decisión del empresario.

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