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Boulevard

Le roban un Rolex de 40 mil euros pero no es fiscal jefe

Dos robos de Rolex en una semana en Binissalem y Sencelles: "Somos muy pocos, tenemos mucho trabajo y hacemos lo que podemos; si detenemos a la ladrona, ni entrará en la cárcel"

Que viene la ecotasa. La imagen captada por Sabina Pons en la Playa de Palma muestra a una turista inerme poco antes de ser devorada por el nuevo símbolo que el PSOE en el Govern ha diseñado para el impuesto ecológico, una grácil excavadora que envidiaría el PP.

En un paseo por Palma para dar a las clases populares la oportunidad de encontrarse conmigo, me encuentro con el mallorquín afincado en el extranjero M. V. Solo coincide conmigo en las iniciales, porque no tengo Rolex ni Jaguar. Casi sin darme tiempo a saludarle, me cuenta su trepidante peripecia:

"El pasado domingo, día de feria en Inca, aparqué mi Jaguar en el Carrer des Bons Aires de Sencelles para comer en Sa Cuina de N'Aina. Al salir del parking se me acercó una mujer de cabello negro, vestida del mismo color, no muy alta, con sobrepeso. Llevaba una carpeta azul con una hoja de papel y me pidió, en un castellano con acento de Europa del Este, que firmara para solicitar un centro médico para niños discapacitados, quién puede negarse a eso aunque hoy me parece una tontería. Una vez estampada la firma, me alargó la mano izquierda para que se la estrechara, una cosa extraña. No respondí a ese gesto, y entonces ella intentó darme un beso mientras me agradecía mi gesto. Le dije "eso no" y me la quité de encima. Ni me di cuenta entonces de que me había robado mi Rolex Oyster Perpetual Date de oro macizo. Es de cadena continua, más difícil de abrir. Me lo había regalado mi esposa hace más de cuarenta años, debe estar valorado entre treinta y cuarenta mil euros. La mujer desapareció. Pregunté por la Policía Local y me dijeron que estaba cerrada los sábados y domingos. Fui al cuartel de la Guardia Civil de Inca, y estuve horas efectuando una denuncia. Me dijeron que la competencia era de Binissalem, después de Sineu. Cuando les urgía, me respondían que 'somos muy pocos, tenemos mucho trabajo y hacemos lo que podemos'. Finalmente, me citaron el miércoles en Inca para una rueda de reconocimiento fotográfica 'que solo puede hacer la policía judicial'. A cada funcionario, yo le repetía que mi reloj ya debía haber dado la vuelta al mundo, y que cuando al fiscal jefe de Balears le robaron un Rolex este año, en un par de horas se lo arreglaron deteniendo a los ladrones italianos en el avión con el que pensaban huir deteniendo a los ladrones italianos en el avión con el que pensaban huir de Mallorca. Tres días después, me mostraron ocho o nueve fotografías de mujeres, porque no tenían más. Ninguna era mi ladrona, la hubiera identificado de inmediato. Me comentaron que una semana antes habían robado otro Rolex en Binissalem a una señora, ella tenía un BMW. En Sencelles me indicaron que una mujer como la que yo describía se había abrazado a un cliente en un bar, sustrayéndole unos ochenta euros. Volví otras dos veces al aparcamiento, por si me topaba con la mujer, por lo visto se trata de que hagamos el trabajo nosotros. Individualmente, todos los agentes que encontré se comportaron de maravilla. Muy amables, educados y profesionales. Sin embargo, mi impresión es que se encuentran también desilusionados, desmotivados. Me decían que 'si detenemos a la ladrona, ni entrará en la cárcel. Y si llega a juicio, saldrá libre de los juzgados antes que usted'. Me explicaron que el Rolex lo deben haber enviado a su país por un servicio de paquetería, y que la mujer seguramente ha volado ya a Canarias para la temporada de invierno. Volverá el año que viene, a lo suyo. No he tenido los privilegios de otros a quienes pago el sueldo con mis impuestos". Así acaba esta historia con final infeliz, porque mi nuevo amigo M.V. se despide una semana después con una resignada convicción, "del reloj me he despedido".

La imagen de capricho goyesco que hoy nos ilustra se titula "Que viene la ecotasa". Ha sido captada por Sabina Pons en la Playa de Palma, y muestra a una turista inerme poco antes de ser devorada por el nuevo símbolo que el PSOE en el Govern ha diseñado para el impuesto ecológico, una grácil excavadora que envidiaría el PP. Vean Parásitos, si quieren saber cómo se dice Berlanga en coreano, y si se preguntan por qué el New York Times se pregunta por qué es la película del año.

Reflexión dominical traficante: "Desear que un señor se caiga del patinete que te ha amenazado por la acera no es pecado".

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