Los mercados emisores del Reino Unido, Alemania y los países escandinavos se están contrayendo, sin embargo, la pérdida de turistas no redunda en la caída del gasto, se insiste desde Turespaña.
Mientras, se abre el panorama de visitantes procedentes de Estados Unidos, pues frente a los 68.000 que llegaron al archipiélago en 2018, este año entre enero y agosto la cifra ya se elevó a 69.000. "Cada vez hay más interés en esta isla", aseguró ayer José Manuel de Juan, consejero de Turespaña en Nueva York.
Y desde Rusia, de donde han venido este año a España 1,4 millones de turistas , un 6% llegan al archipiélago, a pesar de la traba que supone que los rusos necesitan visado, resaltó Antonio de la Morena, consejero de Turespaña en Moscú.
Los 'hombres' del Instituto de Turismo de España (como bromeó Manolo Molina, director del Hosteltur, moderador de una de las mesas de la jornada de la FEHM, al percatarse de la nula presencia femenina) coincidieron en desterrar la idea de que los paquetes turísticos corran peligro, en el contexto de la quiebra de Thomas Cook y a pesar del crecimiento del canal online.
"Tienen muchísimo recorrido", afirmó Arturo Ortiz, consejero en Berlín, tanto que si en España se acaba de anunciar que Correos va a empezar a ofertar viajes, los paquetes turísticos se acabarán vendiendo en los supermercados y "hasta Tinder los acabará vendiendo".
En este sentido Javier Piñanes, director de la Oficina de Turismo de Londres, aludió a que la quiebra de Thomas Cook ha puesto de manifiesto la seguridad que da a los turistas viajar con un conjunto de servicios asegurados, en el caso del Reino Unido por la garantía ATOL.
También estuvo presente ayer el brexit, con la devaluación de la libra de trasfondo, y el conflicto catalán. Como destacaron los consejeros de Turespaña, preocupa a corto plazo. En el caso de los británicos, dijo Piñanes que los atentados, los disturbios o los problemas en los aeropuertos, incluidos los conflictos laborales o las cancelaciones, por ejemplo en Palma, les "ponen nerviosos."
