La conselleria de Educación ha abierto expediente administrativo para investigar el caso del colegio concertado Beata Francinaina Cirer, de Mallorca, al negarse a ofrecer una alternativa a la clase de religión. Esta medida se ha adoptado después de que un padre llevara el caso a la Conselleria, tras pedir al colegio que su hija cambiara la clase de religión por la de valores sociales y cívicos obteniendo una respuesta negativa, según desveló esta semana el periódico digital diario.es.

La Conselleria explicó ayer que, una vez reunida la comisión de conciliación sin alcanzarse un acuerdo, se ha abierto un expediente administrativo para ver si se ha producido un incumplimiento de las condiciones del concierto tras lo cual se analizará, si es así, si se trata de un incumplimiento leve, grave o muy grave y se acordarán las sanciones correspondientes.

Añadieron que es el único caso que ha llegado a sus manos por este motivo, algo que también confirma Escola Catòlica, la patronal de colegios concertados religiosos a la que pertenece el centro Beata Francinaina Cirer. Su asesor jurídico, Marc González, defiende que los centros concertados religiosos no están obligados a ofrecer esta alternativa a la clase de religión, mientras que para la Conselleria la obligatoriedad está clara en la normativa vigente.

González declaró ayer que, si bien no hay una postura acordada entre los centros concertados religiosos respecto a no ofrecer alternativa a la clase de religión, "realmente, salvo este caso en concreto en el que no están de acuerdo el padre y la madre, no hay demanda de esta alternativa porque los padres que envían a sus hijos a un centro católico aceptan desde el principio que se imparte la asignatura de religión católica".

"No es que no se ofrezca o se deje de ofrecer una alternativa, es que no hay demanda de los padres", sostiene González según el cual los centros concertados católicos tienen derecho a "configurar su oferta educativa conforme a su ideario" y los padres que optan por estos centros lo hacen conscientes de esto. "Incluso en algunos colegios tenemos alumnos musulmanes y no ha habido problemas", sostiene Marc González.

Para la conselleria de Educación la normativa es clara y los centros concertados tiene la obligación de ofrecer la alternativa de la clase de valores éticos en lugar de la de religión si los padres lo piden. En el caso sobre el que se ha abierto expediente administrativos, el acuerdo judicial de separación de los padres incluye que el padre tiene derecho a pedir que su hija no curse Religión sino la asignatura alternativa.