La filial alemana de Thomas Cook, también declarada en situación de insolvencia por la grave situación económica que atraviesa, ha cancelado todos sus viajes hasta final de año, aunque estos paquetes turísticos ya se hubieran pagados, parcial, o totalmente. Esta filial había anunciado que la paralización de la actividad solo se mantendría hasta finales de octubre. Sin embargo, ayer anunció que también se suspenden los viajes de noviembre y diciembre. Esta comunicación se remitió a los clientes que habían contratado sus vacaciones con esta empresa. Esta decisión de la filial germana no agravará el perjuicio sufrido por el sector turístico de Balears, dado que los hoteleros ya no esperaban que Thomas Cook enviara más clientes esta temporada, debido al anuncio de la quiebra de la compañía.