El cartel electoral socialista al Congreso por el PSIB, Pere Joan Pons, y los aspirantes al Senado Cosme Bonet y Susana Moll han apelado esta mañana a los votantes progresistas a acudir a las urnas a pesar de "entender la frustración" ante una nueva cita electoral. El PSIB asume así el riesgo de la abstención con el mensaje de que si esta se produce en los votantes de izquierdas puede llegar un Gobierno de "derecha y extrema derecha" que aplicaría políticas de recortes, "retrocesos e involución".

Pons ha defendido que "la mejor manera de conseguir estabilidad" es un Gobierno progresista y ha insistido en que el objetivo del PSIB es volver a ser "el partido más votado" el 10 de noviembre en Balears. Así, los candidatos han apelado a la "movilización" de sus bases y sus votantes para "construir un muero contra la derecha".

Pons, Bonet y Moll han puesto constantemente como ejemplo a la líder del PSIB y presidenta del Govern, Francina Armengol, y han rechazado que ante la nueva cita con las urnas estén pidiendo una "segunda oportunidad" ya que la nueva convocatoria de elecciones es una prueba de "funcionamiento democrático". En este sentido el candidato al Congreso ha recordado la repetición electoral en 2016 ante la cual "hubo gente que no se quejaba tanto".