Las siete pateras detectadas hoy en Baleares elevan a 355 los inmigrantes irregulares que este año han desembarcado en las islas procedentes de Argelia, según han informado en una rueda de prensa el delegado del Gobierno en funciones, Ramón Morey, y el jefe superior de Policía, Gonzalo Espino. Morey ha destacado que tres de cada cuatro sin papeles arribados este año ya han sido devueltos a su país, mientras que el resto no ha podido ser expulsado por falta de plazas en los centros de internamiento (CIEs). Morey ha reconocido que las islas, al igual que varias zonas del sureste peninsular, llevan sufriendo, desde agosto, una oleada de pateras, “que vienen en flotillas”.

Según el delegado del Gobierno, hasta anteayer en toda España habían llegado 1070 sin papeles en estas frágiles embarcaciones, de los que 304 desembarcaron en Baleares.

Hoy se han localizado siete pateras: una en Mallorca, dos en Eivissa, tres en Formentera y una en Menorca esta tarde y se han detenido por la Guardia Civil a 53 personas (once en Mallorca y el resto en las Pitiusas).

Solo dos de los 345 migrantes llegaron antes de agosto y el aluvión se ha producido desde entonces.

Morey destacó que España se ha convertido en un destino apetecido para las pateras y vinculó la ola de desembarcos a “razones económicas o políticas en Argelia que desconocemos”.

El delegado del Gobierno indicó que en 2017 se detuvieron a 276 sin papeles en las islas, cifra que bajó a 194 el año pasado. Todos ellos fueron conducidos a CIEs desde donde se organizó su regreso a Argelia.

De los 355 sin papeles descubiertos por la Guardia Civil y la Policía, 19 son menores de edad, aunque esta cifra puede subir cuanto se identifique a los últimos arribados.