"Hay empresas promotoras que ya han decidido dejar de invertir en Mallorca y van a desarrollar su actividad en otras comunidades autónomas. En el sector estamos desesperados". Estas palabras corresponden al presidente de la patronal balear de este sector, Luis Martín, que subraya que se ha solicitado mantener reuniones con la presidenta del Govern, Francina Armengol, y con el conseller de Vivienda, Marc Pons, para abordar esta cuestión.
El motivo de esa "desesperación" es el colapso que existe en las administraciones isleñas a la hora de tramitar los permisos necesarios para poner en marcha cualquier proyecto de edificación de nuevas residencias, y que puede conllevar esperas de años, según lamenta, pero además sin tener ninguna certeza sobre el tiempo que esa demora va a alcanzar.
La decisión de no poner en marcha nuevos proyectos inmobiliarios en Mallorca ha sido adoptada incluso por una gran firma de ámbito nacional, al igual que por algunas otras locales de menor tamaño, y se sustenta, además de en la dificultad para encontrar suelo, especialmente en la extrema lentitud con que se están tramitando las iniciativas que se quieren poner en marcha, lo que multiplica el riesgo de no obtener finalmente las rentabilidades previstas.
Luis Martín subraya que el problema no se da únicamente en los Ayuntamientos, algunos de los cuales registran demoras de más de un año en la tramitación de las licencias, sino que alcanza a todas las Administraciones. Así, pone de relieve que uno de los principales obstáculos a los que se enfrentan las empresas promotoras es ahora el informe que en ocasiones se necesita de Recursos Hídricos. Como ejemplo, apunta que el proyecto para la edificación de viviendas de alquiler en la zona alta de la calle Aragón se encuentra paralizado por este motivo.
Los municipios son señalados también como responsables directos de este problema. Al respecto, se pone de relieve que el plazo máximo legamente previsto para la concesión de la licencia municipal es de tres meses, mientras que en muchos casos esa espera alcanza el año o incluso se supera. En este grupo se encuentra el Consistorio palmesano, que alarga ese plazo hasta el año, y los hay en los que se llega al año y medio. Una de las empresas de mayor tamaño que ha decidido dejar de impulsar proyectos en la isla ha desarrollado varias promociones en Palma, según destaca el presidente de la patronal.
El argumento que se esgrime ante el sector es fundamentalmente el mismo: escasez de personal en las áreas de urbanismo, con municipios en los que algún técnico atiende solo un par de días a la semana.
Acceso a la financiación
Pero a este problema se suma otro adicional: estos retrasos están haciendo que muchos inversores se retraigan a la hora de facilitar el acceso de financiación a los promotores. Hay que tener en cuenta que los bancos solo conceden crédito a estos últimos si el proyecto que presentan incluye ya el suelo en propiedad, para cuyas compras el sector también recurre a la financiación externa por otras vías.
Luis Martín ha señalado que el problema ha alcanzado tal magnitud que desde su asociación empresarial y desde la de constructores se ha solicitado un encuentro con el conseller Marc Pons, con el fin de aclarar si existe la intención de adoptar alguna medida para hacer frente a este problema. Previamente, ya se ha mantenido un primer contacto con el director general de la Vivienda, Eduardo Robsy.
Dependiendo del resultado del cara a cara con Marc Pons, se insistirá en mantener una audiencia con la presidenta Armengol para seguir abordando estas cuestiones. En cualquier caso, se recuerda que esta última lleva ya más de cuatro años al frente del Govern, sin que se haya adoptado ninguna medida significativa en esta materia, de ahí en que se insista sobre la necesidad de que el Govern de un giro en su estrategia en materia de vivienda.
La escasez de vivienda se seguirá agravando en Mallorca
Durante los siete primeros meses de este año la compraventa de viviendas ha descendido casi un 12% en Balears, con descensos de casi un 4% en la de nueva construcción y de más de un 13% en la usada, al tiempo que el número de las que se han proyectado durante el primer semestre en Mallorca se mantiene estancado, aunque su valor evoluciona al alza, según los diferentes informes publicados durante las últimas semanas. Según el presidente de la asociación de promotores inmobiliarios de Balears, estos datos reflejan que el problema de escasez de residencias no deja de crecer en las islas, y subraya que además no tiene visos de mejorar a medio plazo.
Porque además de los retrasos derivados del colapso de las Administraciones a la hora de tramitar permisos, aparece también el problema de la escasez de suelo a precio asequible para poder impulsar viviendas que puedan ser adquiridas por las clases medias.
Luis Martín señala como ejemplo el proyecto de Son Busquets, en Palma, que incluye viviendas protegidas, y pronostica que acabará esta legislatura sin haber puesto la primera piedra para su desarrollo.
