La quiebra del turoperador británico Thomas Cook, que ha afectado a 600.000 viajeros en ruta, muestra que el concepto de paquete turístico "tiene que reformularse", según reconoce la responsable de Inteligencia de Mercado y Competitividad de la Organización Mundial de Turismo (OMT), Sandra Carvao.

"Yo creo que desaparecer no, pero tiene que reformularse, la gente busca un servicio pero ya no como antes, hay determinados destinos donde el paquete seguirá teniendo mucha fuerza, pero hay que reinventar qué paquete turístico", consideró la representante de la OMT.

Para Carvao la crisis provocada por la quiebra del gigante británico, que ha afectado en España a unos 53.000 viajeros, es una muestra de una empresa que "no se ha adaptado a los nuevos tiempos". Aunque consideró que "no se puede decir que sea la muerte del paquete turístico", porque de hecho en España está aumentando esta modalidad de vacaciones desde 2010, deber producirse una "reinvención", insistió la directiva de la OMT, que pidió esperar acontecimientos respecto a Thomas Cook.

"Vamos a ver qué pasa en las próximas semanas, porque esto es muy reciente, para ver hasta que punto hay un reemplazo. Ya se hablaba de TUI como interesada en reemplazar algunos destinos, vamos a ver cómo reacciona el mercado", agregó.

La OMT está haciendo seguimiento de la situación con los países más afectados y Carvao apeló a la "responsabilidad" de los estados que deben asegurarse del regreso de sus residentes, un aspecto que está recogido en el Código Ético Mundial para el Turismo, transformado en convención en 2017.

La caída del turoperador británico es un fuerte golpe para el empleo turístico, ya que Thomas Cook da trabajo en España a unas 2.500 personas, pero su incidencia puede alcanzar el 10 % del empleo del sector en las zonas más afectadas, como Baleares y canarias. Un impacto que se une a los desafíos del sector turístico provocados por la transformación digital.