La Comisión Balear de Medio Ambiente votará este jueves un dictamen con el que frenar un aumento de la capacidad aérea del aeropuerto de Son Sant Joan. El documento proponer exigir un informe de impacto ambiental para los planes de cambio de rutas de despegues y aterrizajes previsto para agilizar las maniobras en el aeropuerto ante el actual volumen de operaciones y que, a la práctica, supone aumentar la capacidad de operación de vuelos.
Enaire lleva meses tramitando un proyecto de rediseño de maniobras de salida y llegada ante la actual "congestión del aeropuerto y del espacio aéreo". Según el proyecto elaborado por la autoridad aérea, a día de hoy aumentan las demoras y los vuelos tiene que esperar en el aire hasta tener permiso para aterriza y el tiempo en pista para despegar, lo que supone un aumento de las emisiones.
Este proyecto se suma a otros tres proyectos de ampliación, uno de las pistas, otro del área comercial y otro inmobiliario, de Son Sant Joan. Por el consecuente aumento de vuelos que el plan de Enaire supondría, la subcomisión técnica de la Comisión Balear de Medio Ambiente ha elaborado un dictamen, que deberá ratificarse este jueves y que concluye que "el proyecto puede causar impacto ambientales significativos" y por el que plantea exigir un informe de impacto ambiental a Enaire.
Entre las cuestiones que el dictamen contempla se encuentra la necesidad de "analizar la capacidad de carga" de las isla, "teniendo en cuenta la situación actual, con factores que indican un grado importante de saturación" en el caso que el rediseño de las maniobras suponga "incrementar el número de pasajeros". De hecho, el subcomité de evaluaciones ambientales propone incluso "instar al ministerio de Fomento a que no autorice ningún proyecto que suponga un incremento de operatividad, vuelos y pasajeros".
Restringir operaciones de noche
El informe recuerda que el Plan Director del Aeropuerto de Palma contempla que "el sistema se saturará cuando el aeropuerto alcance los 89 movimientos por hora", cifra que el informe recuerda que se ha superado este año con "puntas de actividad de más de cien operaciones por hora".
El dictamen plantea también "la posibilidad de restringir las operaciones en horario nocturno -de las 23h a las 7h de la mañana, así como "incluir medidas compensatorias respecto al ruido, destinadas a la protección de la población local" así como medidas protectoras o correctoras respecto al ruido", pero pensadas para la protección de las aves. En esta línea, pide más estudios sobre los peligros de los vuelos para las aves, especialmente para el voltor negre, y también estudios sobre los efectos de este aumento en la contaminación atmosférica.
El dictamen será debatido y votado este próximo jueves por el pleno de la Comisión Balear de Medio Ambiente. Su aprobación y la exigencia del informe supondría una traba para el plan de Enaire.
