Los servicios de cita previa de la Administración central para atender a los extranjeros en Balears están registrando un "colapso tremendo" que está impidiendo a miles de inmigrantes obtener y renovar autorizaciones para poder vivir y trabajar en el país, obtener la nacionalidad española o permitir la reunificación de sus familias, según denuncian las asociaciones que representan a estos colectivos. El problema ha alcanzado tal envergadura que algunos de los afectados están padeciendo esperas de hasta cinco meses para poder realizar estos trámites, a lo que se añade la denuncia de la existencia de un 'mercado negro' en el que algunos particulares ofrecen citas a cambio del pago de una cantidad económica.

El drama que muchos extranjeros están viviendo en las islas es expuesto por los presidente de cuatro asociaciones de inmigrantes: de Brasil, Sandra de Melo; de Marruecos, Mustafa Boulharrak; de Colombia, Norbey Andrade; y de Portugal, Fernando Cabaço, que forman parte del grupo que está organizando una plataforma para hacer frente a estas situaciones, y de la que en principio también podrían formar parte las asociaciones de Venezuela, República Dominicana o Bolivia, entre otras.

Porque según recuerdan los denunciantes, en junio se mantuvo una reunión con la entonces delegada del Gobierno en las islas, Rosario Sánchez, en la que estuvo presente el actual titular en funciones de este cargo, Ramón Morey, para exponer el alcance del problema. Según los presidentes de estas asociaciones, la respuesta que obtuvieron es que las demoras se deben a la escasez de personal por la marcha de funcionarios y no poder reponerlos. Y por ahora nada mejora.

La situación que se describe es simple: cuando un extranjero pretende solicitar cita previa a través de la página web correspondiente para hacer un trámite, la mayor parte del día esta posibilidad permanece inoperativa, y obliga a estar horas delante del ordenador a la espera de que la opción se abra. Y si se intenta hacer por teléfono, nadie contesta a la llamada.

Situaciones expuestas

Esto provoca situaciones como que una pareja de extranjeros que ha tenido a su hijo en Mallorca lleve casi seis meses esperando poder tramitar la nacionalidad española de éste, o que otra persona lleve ya más de dos meses intentando conseguirlo para convalidar su carné de conducir, por citar algunos ejemplos.

El problema, se añade, afecta también al servicio para extranjeros de la Policía Nacional, al que se acude para registrar la huella dactilar y tramitar el número de identificación (NIE), para lo que las esperas a la hora de conseguir cita previa acumulan también varios meses. Una situación que afecta tanto a extranjeros comunitarios como extracomunitarios, de ahí la participación de la asociación de portugueses en la plataforma.

Este conflicto hace que se esté acumulando el número de inmigrantes que ven como sus autorizaciones para residir en las islas caducan, o incluso como se les bloquea la posibilidad de proceder a la reunificación con sus familias. En este último caso con un problema adicional: para llevar a cabo esas reunificaciones es necesario obtener una documentación en el país de origen que tiene un coste económico y también caduca, por lo que no conseguir cita previa supone tener que volver a pedirla. "La impotencia que muchas personas sienten es enorme", se asegura.

Todo eso si se quiere hacer estos trámites de forma gratuita. Porque las asociaciones de extrajeros recuerdan que la Delegación del Gobierno tiene un convenio con algunos colegios profesionales, como el de abogados, que tienen acceso con mayor facilidad a las citas previas, pero eso supone pagar 50 euros para obtener sus servicios.

Como siempre que un problema afecta a muchas personas, surge la picaresca, con la aparición de un 'mercado negro' por parte de individuos que obtienen un paquete de citas previas y luego las ofrecen a cambio de cantidades económicas que pueden ser de cientos de euros, según se indica.