La falta de lluvias está haciendo mella en la situación de los acuíferos de Mallorca. De septiembre de 2018 a agosto de este año las reservas hídricas mallorquinas han pasado del 58% al 50% actual, lo que ha llevado a la conselleria de Medio Ambiente y Territorio a declarar la situación de prealerta por sequía. En el conjunto de Balears la situación es aún peor y la media no supera el 49% debido al escaso caudal que registran los acuíferos de Eivissa.

No obstante, de las siete unidades de demanda de agua de Mallorca, cinco se encuentran en situación de prealerta y solo dos mantienen un nivel aceptable de reservas hídricas. Los acuíferos del Llevant, en concreto los de Artà, Son Servera y Sant Llorenç son los que se encuentran en mejor situación y alcanzan el 80% de su capacidad. Curiosamente es la zona de las riadas mortales del pasado mes de octubre que llenaron por completo los almacenes subterráneos de agua. Los del Pla de Mallorca están entre el 54% y el 56%.

El resto de unidades hídricas se encuentra en estado crítico. Es el caso de las dos existentes en la Serra de Tramuntana, como la de Almadrava en Pollença que está en torno del 30% de su capacidad, la del Pla de Palma que no supera el 25%, la del Migjorn, donde la de Sant Salvador en Felanitx sólo llega al 5% o la de la Marina de Llevant, que va de Cala d'Or a Manacor, que está en el 44%.

Algunos acuíferos tienen el problema de que cuando bajan en exceso su caudal de agua dulce, al estar cerca de la costa, reciben una inyección de agua salada y baja de forma espectacular la calidad del agua que albergan.

Situación de todo Balears

Por lo que respecta al conjunto de Balears, el estado de los acuíferos es del 49% del caudal máximo de su capacidad, un 2% por debajo al que registraron el mes de julio y un 7% menos de caudal que el pasado año por estas mismas fechas que llegaron al 56% de su capacidad máxima.

De las diez unidades de demanda hídrica que hay en las islas, cinco de ellas (Manacor-Felanitx, Migjorn, Palma-Alcúdia, Tramuntana Sud y Eivissa) entran este mes en escenario de prealerta de sequía. Cabe recordar que la de Tramuntana Nord ya entró en este escenario el pasado mes de julio. Esto significa que, tal como estipula el Decreto 54/2017 por el cual se aprueba el Plan Especial de Actuación en Situaciones de Alerta y Eventual Sequía de las Illes Balears, es necesario empezar a tomar medidas de gestión en los municipios que integren estas seis unidades de reserva hídrica y sus acuíferos.

Asimismo, cinco unidades de demanda más (Tramuntana Sud, Palma-Alcúdia, Migjorn, Manacor-Felanitx y Eivissa) están a punto de entrar en el mismo escenario que la de Tramuntana Nord. Según explican desde la conselleria de Medio Ambiente que dirige el conseller Miquel Mir, cuando una unidad de demanda hídrica entra en escenario de prealerta durante tres meses consecutivos ya se considera que ha llegado al escenario de alerta y es cuando se deben empezar a tomar medidas para regular la extracción de caudal y poner en marcha acciones de ahorro.

Las reservas hídricas de Tramuntana Sud, Palma-Alcúdia, Migjorn, Manacor-Felanitx y la de Eivissa han cumplido, durante el mes de julio, el segundo mes en esta situación. Todo indica, por tanto, que tendrían que empezar a tomar medidas a partir del mes siguiente.

Desde la conselleria de Medio Ambiente apuntan que "el mes de septiembre suele ser un mes relativamente húmedo y que las extracciones disminuirán, por consiguiente es de suponer que la situación a finales de mes sea mejor que la actual, aunque el escenario no cambiará de forma importante con respecto a la actualidad".

En consecuencia, en el mes de septiembre seguirá habiendo 6 unidades de demanda hídrica en escenario de prealerta y no saldrán, al menos, hasta el mes de noviembre ya que para poder cambiar de escenario es necesario tres meses seguidos en situación de normalidad.

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