La conselleria de Movilidad y Vivienda destinará 6.364.000 euros en 2019 a ayudas al alquiler de viviendas para familias con recursos escasos, con un máximo de 4.000 euros anuales por beneficiario, explicó ayer el conseller Marc Pons sobre esta convocatoria cuyo plazo de solicitud empieza hoy
Pons detalló que las puede solicitar cualquier ciudadano con un alquiler inferior a 900 euros al mes, que no tenga ninguna vivienda en propiedad y con ingresos anuales inferiores a 22.559 euros; o si es familia numerosa de situación general o especial, o con discapacitados al cargo, con ingresos de hasta 37.600 euros.
La ayuda cubre el 40% del alquiler hasta un máximo de 4.000 euros al año, a razón de 330 euros mensuales; salvo en el caso de que el solicitante sea menor de 35 años o mayor de 65, cuando la ayuda es del 50%, hasta un máximo de 4.300 euros anuales o 360 mensuales.
El conseller recalcó que el techo de alquiler se ha fijado en 900 euros porque "se ajusta" a un mercado de alquiler existente y porque busca poder dar una respuesta "a familias que tienen dificultes para llegar a fin de mes y para quienes el alquiler se lleva buena parte de sus ingresos".
Pons dijo que la demanda de estas ayudas no ha dejado de aumentar y si en 2015 fueron 785 los beneficiarios, en la convocatoria de 2018, habrán sido 2.553, que todavía no las han cobrado "por algunas demoras" en la tramitación, pero las percibirán previsiblemente en noviembre.
Detalló que en 2016 hubo 1.478 beneficiarios y en 2017 fueron 2.352, de manera que en los cuatro últimos años se han tramitado 7.168 ayudas, si bien Pons precisó que no hay equivalencia entre número de ayudas y beneficiarios, porque hay familias que las han solicitado y obtenido varios años.
La previsión es que esta convocatoria siga la "evolución creciente", que ha supuesto un incremento de más del 300% en tres años.
El conseller Marc Pons manifestó que otro objetivo es "ir perfeccionando" el sistema para que los pagos sean más ágiles.
De los 6,3 millones de euros que se destinan a las ayudas al alquiler este año, 196.000 euros son fondos propios de la comunidad autónoma y el resto del montante, la gran mayoría, son fondos aportados por el Ministerio de Fomento.
El PP denuncia impagos a 2.500 familias por valor de 4,5 millones
El Grupo Parlamentario Popular, a través de su portavoz adjunto, Toni Costa, criticó ayer que las ayudas por el alquiler de viviendas correspondientes a la convocatoria de 2018 sigan en estado de impago. Costa señaló que en el PP "preocupa que no se trate de un problema de tramitación como argumenta el Govern, en alusión a "los 4,5 millones de euros que corresponden a las ayudas a 2.500 familias que todavía no se han pagado".Costa recordó que "el déficit" asciende a 417 millones de euros, lo que para el popular "puede ser causa directa de que los ciudadanos de Balears no vayan a empezar a cobrar las ayudas del año pasado hasta el próximo mes de noviembre".
Por su parte, el portavoz y diputado del Grupo Parlamentario Ciudadanos, Marc Pérez-Ribas, registró ayer varias preguntas parlamentarias en las que insta al Govern a dar explicaciones sobre el retraso en el pago de las ayudas al alquiler correspondientes.
