Según ha informado la conselleria de Salud en una nota de prensa, ya son 78 los intoxicados por comer en el restaurante Dragon Sushi de la calle Blanquerna en Palma. Además, los positivos en salmonelosis han ascendido a trece afectados. El restaurante sigue cerrado desde el pasado domingo de manera cautela a la espera de los análisis de los alimentos para determinar el origen del brote de intoxicaciones.

Por otra parte, el otro Dragon Sushi, ubicado en Santa Catalina, en la calle del Torrent, permanece abierto, y Salud ha afirmado que "se ha inspeccionado y no hemos encontrado motivos para cerrarlo". En el folleto publicitario del local, además, aparecen las dos direcciones de los restaurantes Dragon Sushi que hay en Palma, por lo que son de la misma propiedad.

Los trabajadores del establecimiento que sigue abierto han afirmado esta mañana a este periódico, sin necesidad de hacer ninguna pregunta, que "somos empleados, no podemos decir nada". En relación a esto, una de las trabajadoras le ha dicho a una periodista del programa Al Dia, de IB3 Ràdio, que "no está el encargado, pero si estuviese tampoco te lo diría".

Por otro lado, un hombre que conoce el local ha explicado esta periodista, que "los dueños de los dos establecimientos son primos". Además, la misma persona afirma que desde que se ha destapado el caso de las intoxicaciones "hay bastante menos gente en el restaurante, antes estaba mucho más lleno".

"Las notificaciones de los casos se ha producido paulatinamente según se desarrollaban los síntomas y los afectados llegaban a los centros sanitarios", ha explicado el Govern. Además, ha destacado que "es la primera vez que se ralentiza la notificación de damnificados desde la detección del brote".

Si se miran las cifras de personas, los afectados se dividen en 38 mujeres y 40 hombres, según ha informado el Govern en la nota de prensa. En cuanto a tramos de edad, hay 30 afectados menores de 20 años, 39 intoxicados entre 21 y 40 años de edad y nueve mayores de 41 años. Por otra parte, dos de los damnificados permanecen ingresados en Son Espases.

Ayer el Govern ya confirmó que hay intoxicados que son de otras regiones españolas, por lo que el Servicio de Epidemiología dio un aviso al Centro Coordinador de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), que depende del Ministerio de Sanidad. Además, este departamento balear de epidemias continúa haciendo encuestas a los afectados y se mantiene a la espera de los resultados.

Salud afirmó que el restaurante cerrado no podrá reabrir sus puertas hasta que no cambie las deficiencias que encontró la inspección del Govern y, además, tiene que presentar un protocolo a la Dirección General de Salud Pública, que debe dar el visto bueno para la reapertura.El otro restaurante de la misma propiedad funciona con normalidad

El otro Dragon Sushi, de la misma propiedad del restaurante cerrado cautelarmente por Salud y que está ubicado en la calle del Torrent de Santa Catalina, ya ha sido inspeccionado, según informó ayer el Govern en una nota de prensa, aunque "por ahora no hemos encontrado deficiencias que motiven su cierre".

Según pudo comprobar este periódico, los dos establecimientos tienen la misma carta y en el folleto publicitario se puede ver la dirección de los dos locales, por lo que se podría deducir que tiene el mismo modo de trabajar que el que se ha cerrado por causar 70 intoxicaciones, aunque de momento no ha habido ningún afectado por comer en este local de Santa Catalina. También utilizan la misma política de trabajo con la que pagas de manera extra por cada pieza que dejes.

Por su parte, los trabajadores del restaurante que sigue abierto dijeron ayer por la mañana a este periódico, sin necesidad de hacer ninguna pregunta, que "somos empleados, no podemos decir nada". En relación a esto, una de las trabajadoras expresó a una periodista del programa Al Dia, de IB3 Ràdio, que "no está el encargado, pero si estuviese tampoco te lo diría".

Por otro lado, un hombre que conoce este local de la calle del Torrent explicó a esta periodista que "las personas que regentan los dos establecimientos son familiares, concretamente primos".

Además, la misma persona afirmó que desde que se ha destapado el caso de las intoxicaciones "hay bastante menos gente en el restaurante, antes de todo esto estaba mucho más lleno".

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