—Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Ana Aranda, fanática?"

—Ana Aranda, con las ideas y convicciones muy claras. Es fanática proabortista, contra el esclavismo o los plásticos. Sin perder el norte, desde la racionalidad.

—¿Los gatos son una plaga en Mallorca?

—La castración obligatoria de gatos domésticos que salen al exterior es una necesidad social, y la llevamos a cabo en una antigua ambulancia de Son Dureta.

—No me caen simpáticos, pero me parece cruel.

—Pasan a una mejor calidad de vida. Quienes cuidan a las colonias de gatos callejeros son nuestros principales aliados, el cincuenta por ciento del equipo.

—¿Seis toros muertos son para tanto?

—No se necesita un mínimo para escandalizarse. Me basta un ahogado en el mar, no hace falta una patera. No le reconozco ningún valor artístico a lo que sucede en la plaza.

—El Coliseo Balear se llenó gracias a los animalistas.

—Llevaban dos años sin corridas, y ellos sí son fanáticos de arponear al toro con banderillas en la espina dorsal, o de que el picador les perfore el pulmón.

—¿Cómo les trata la Policía en sus protestas?

—Nos trata de forma diferente. Se les nota que están en contra de quienes nos manifestamos para protestar frente a la plaza. Es evidente.

—Animalistas y taurinos hablan en nombre del toro.

—Así es. Y en nombre de los plásticos, y del planeta, hablo por quienes no tienen voz. Claro que podemos hablar en nombre del toro.

—Sin lidia se mueren los toros.

—Mosterín recoge en A favor de los toros las once frases que siempre usan los taurinos. Acabas de citar una. Si han de nacer para morir de esa manera, mejor que no nazcan.

—Nunca perdonaré a los animalistas que hayan acabado con el ecologismo.

—Van de la mano. Domesticar a la fuerza a los animales es contra natura, el ecologismo es pro natura. No se conciben perros o gatos o vacas salvajes.

—Soy vegetalista, pero nadie se opone a talar árboles.

—Tienen la misma importancia, absolutamente. En mi barrio se talaron árboles y los vecinos se movilizaron para mostrar su indignación.

—Vi a mi padre matar a cientos de animales, pero nunca los maltrató.

—Ha cambiado nuestra relación con ellos, y la corrida tiene el agravante de la diversión con la muerte del animal. Con litrona y bocata, a contemplar el sufrimiento. Es alevosía.

—Será vegana, por definición.

—No, me gusta comer con el mínimo impacto sobre el medio ambiente. Mejor unos huevos camperos que la comida vegana hiperetiquetada que te viene de otros países.

—En Mallorca todo viene de otros países, la gente y la comida.

—Jane Goodall dice que lo ideal es que pudiéramos alimentarnos del producto obtenido en un radio de ocho kilómetros a nuestro alrededor.

—Con las 'matances' no pudieron, todo tiene un límite.

—Su base es la alimentación y no han degenerado más allá. Puede que incluso se aparte a los niños para ahorrarles el sufrimiento.

—También atacan al trot, deporte nacional.

—Hay mucho rollo detrás del trot, con caballos dopados. La mitad eran de La Paca. Un mundo impenetrable, como el de las galeras.

—¿Su perro no puede sentirse esclavizado?

—Es un perro rescatado, un bretón, por lo que vive mejor ahora que le hemos librado de las cadenas. Una vez domesticada, una especie nunca recuperará la libertad.

—¿Qué le diría a una persona agredida por un perro?

—Si le agrediera otra persona, algo que le ocurrirá con mayor probabilidad, intentaría que no cogiera miedos a los humanos, que somos gente encantadora. Los perros, igual.

—Quienes abandonan a un perro, lo quisieron un día.

—Hay demasiada gente con perros, y no todos están capacitados. La tasa de abandonos en Mallorca está a la cabeza de España. Si no le vas a dar lo que necesita, no tengas un perro.

—¿Hemos de garantizar a los perros el bienestar que no podemos asegurar a los humanos?

—Ni antes ni después, tienen que estar bien los perros y las personas. En relación con los animales hemos asistido a indigentes o a personas separadas, la crisis fue terrible.

—¿En qué han corregido sus estrategias?

—Seguimos en la misma línea, y nos damos cuenta de que no funciona. Estamos en reflexión profunda, no sabemos qué hacer. Demasiado tiempo usando la vía diplomática.