El Observatorio de Puig des Molins, en Ibiza, ha grabado la caída de un potente bólido que ha alcanzado un brillo prácticamente equivalente al de la luna llena. La luna en su fase de plenitud alcanza la magnitud -12,6. Se trata de unos los bólidos más brillantes detectados desde España en los últimos años, según ha confirmado Josep Maria Trigo, de l'Institut de Ciències de l'Espai, del CSIC-IEEC.

Esa magnitud tan brillante sitúa a este objeto en el borde de la categoría de superbólido, nombre que se da a bólidos que superan la magnitud -16 y que, por ello, son además detectables desde el espacio exterior, a través de los sensores que llevan incorporados varios satélites estadounidenses. De hecho, está previsto solicitar confirmación de la posible detección del bólido de Ibiza desde estos satélites para determinar con exactitud su magnitud.

El bólido (un pedazo de roca procedente del espacio interplanetario que atraviesa la atmósfera y se incendia al rozar con ella) fue grabado a las 22,36 horas del viernes 16 y apareció al Este de Ibiza. Es la única grabación de la que se tiene constancia en España de este fenómeno. En la grabación del Observatorio de Puig des Molins, gestionado por la Agrupació Astronòmica d'Eivissa (AAE), se observa cómo el fogonazo principal de su caída se produce estando ya a muy baja altura, concretamente detrás de las murallas de Dalt Vila. Sin embargo, esa baja altitud es un efecto visual de la gran distancia a la que se encontraba el bólido en ese momento. En realidad, se habría desintegrado en algún punto situado entre Mallorca y Cerdeña, al menos a 400 kilómetros de distancia de Ibiza, según las apreciaciones preliminares de la Agrupación Astronómica de Eivissa/Ibiza (AAE) y de Josep Maria Trigo.

Desintegrado a 50 kilómetros de altura

Es posible que la roca se desintegrara a unos 50 kilómetros de altura sobre la superficie del mar y, por tanto, no llegara a impactar sobre nuestro planeta. La gran estela brillante que dejó tras de sí, que podría haber durado varios minutos, estaba formada por la masa incandescente de polvo que dejó tras de sí el bólido. Está descartado que este cuerpo forme parte de las Perseidas (la nube de polvo y fragmentos de roca que la Tierra cruza en su órbita todos los veranos), sino que tendría un origen independiente. Ello es así porque tanto su trayectoria como el lugar del firmamento en el que apareció no concuerdan con las Perseidas.

Aunque no se tiene constancia de otras grabaciones desde otros observatorios de España, sí ha sido visto por numerosas personas desde Cerdeña, Baleares, el sur de Francia y el levante de España. La detección desde Ibiza figura ya en la página web de la red española de seguimiento de bólidos que dirige Trigo: 'spmn.uji.es'.