El Govern anunció ayer la creación de comunidades locales en las zonas turísticas que funcionarán con energías renovables, concretamente la fotovoltaica. En los edificios turísticos, de la administración pública y viviendas no vacacionales de estas zonas se instalarán placas solares para autoabastecerse, además de que "se guardará un excedente de la energía producida para los hogares más vulnerables y minimizar así la pobreza energética", tal y como afirmó el vicepresidente del Govern y conseller de Transición Energética, Juan Pedro Yllanes.

"No ha habido contactos directos con el sector hotelero, pero será necesario la implicación de todos los sectores, por lo que no habrá ninguna resistencia de los hoteleros para participar activamente en el proyecto", explicó Yllanes.

Las instalaciones estarán gestionadas de manera centralizada para distribuir energía. "Así, las que no estén disponibles todo el año como los hoteles, que están cerrados fuera de temporada, seguirán produciendo energía y se distribuirán a otras instalaciones que funcionan todo el año, como las escuelas" añadió.

21 millones de presupuesto

Para iniciar el proyecto se hará una prueba piloto de tres años que contará con un presupuesto de 21 millones de euros, 16 de los cuales vendrán de la recaptación de la ecotasa y los cinco restantes de los participantes en esta prueba.

A través de concurso público se seleccionarán "un mínimo de cinco y un máximo de diez proyectos" teniendo en cuenta que la distribución llegue a todas las islas, cuál será su máxima inversión y que se haga una reserva mínima para hogares vulnerables "como requisito fundamental". Además, el vicepresidente puntualizó que se subvencionará un 80% de las iniciativas privadas y un 100% de las iniciativas de administraciones públicas y de hogares vulnerables.

"El objetivo principal del proyecto es el cambio de cultura energética y que las comunidades locales puedan servir de modelos para concienciar a la población y a los sectores de la importancia de la transición energética", expuso el conseller.

Ventajas del proyecto

Además, según Yllanes, estas comunidades traerán numerosas ventajas: La modernización del modelo económico, la creación de empleo con la construcción y gestión de las placas fotovoltaicas, la mayor competitividad de las empresas turísticas, la lucha contra la pobreza energética y el cambio nuclear del modelo energético.

Aun así, el conseller apuntó que el proyecto piloto no se pondrá en marcha "hasta que no se tenga garantizada la financiación con el impuesto de turismo sostenible", más conocido como la ecotasa.

Ley autonómica Madrid no pondrá pegas a esta medida

En referencia al aviso de inconstitucionalidad que el Gobierno Central hizo a diversos artículos de la ley autonómica de cambio climático, Yllanes aseguró que no prevén "ningún problema con esta medida, ya que una cosa es la discusión de los plazos de reducción de los combustibles fósiles y otra es la implantación de estas comunidades, que está recogida en la ley". Además, el conseller afirmó que la ley autonómica de cambio climático es pionera "tanto en España como en Europa".