El dispositivo desplegado la noche del pasado jueves en Magaluf, s'Arenal y Sant Antoni de Portmany contra el fraude laboral tuvo como uno de sus principales objetivos el desarrollo de controles en los establecimientos de copas y ocio nocturnos de estas zonas, al ser los locales que se vinculan a los "excesos" que se desarrollan en estas zonas turísticas, según el término empleado por el conseller de Modelo Económico, Iago Negueruela.

Hay que tener en cuenta, además, que es el segundo verano en el que se organiza un operativo extraordinario de estas características, tras una primera experiencia durante el pasado año, a finales del mes de agosto.

Esta actuación respalda las denuncias que desde hace tiempo vienen realizando los sindicatos UGT y CC OO, en el sentido de que son precisamente los sectores de la restauración y del ocio nocturno los que presentan un mayor volumen de fraude en materia laboral. Hay que tener en cuenta que en la mayoría de los casos se trata de negocios con una cifra baja de trabajadores, lo que evita el control que se da cuando el volumen de las plantillas permite la existencia de comités de empresa. Incluso desde la propia patronal de restauración de Mallorca se ha denunciado la implantación en muchas zonas turísticas de empresarios que operan durante un corto espacio de tiempo, con unos niveles de calidad bajísimos, para recoger beneficios y desaparecer.

En cualquier caso, el conseller señaló que el plan especial contra la precariedad laboral que se desarrolla durante julio y agosto en las islas, y en el que participan 32 inspectores llegados de la península (una parte de los cuales protagonizó el despliegue organizado el pasado jueves), contempla controles en todas las zonas turísticas para vigilar aspectos como la temporalidad, la parcialidad o los excesos de jornada. Pero el carácter especial de Magaluf y s'Arenal explica que se incorpore un dispositivo extraordinario.