El comportamiento de la temporada turística empieza a dar pistas sobre su evolución con los datos de julio del aeropuerto de Palma. En un verano en el que se apunta desde el mercado hotelero a un cambio de tendencia en el archipiélago tras los récords de los últimos años, Son Sant Joan terminó julio con una bajada en el tráfico de aeronaves, pero un número de pasajeros parecido.

El aeropuerto de Palma cerró julio con 4.207.218 pasajeros, con un descenso del tráfico de viajeros del 0,6% respecto al mismo mes de 2018, cuando se contabilizaron unos 27.500 pasajeros más. Por contra, según las estadísticas de Aena difundidas ayer, se gestionaron un 3,7% menos de aterrizajes y despegues, cayendo en 1.118 las operaciones, que sumaron 28.719.

De acuerdo con estos resultados, como se destaca desde Son Sant Joan, el mes pasado presentó prácticamente la misma cifra de pasajeros que en julio del 2018, lo que muestra que ha mejorado la ocupación de los aviones. Ya en junio se produjo la misma situación, con una caída de los despegues y aterrizajes del 2,4%, aunque entonces sí creció el tráfico de pasajeros un 2,1%, con más de 3,8 millones de viajeros.

Menos extranjeros

Otro dato que ponen de relieve las estadísticas mensuales de Aena es el descenso del tráfico internacional. Si en junio pasado se registraron más de 3,14 millones de pasajeros, con un ligero incremento del 0,5%, este julio el pasaje con origen y destino en el extranjero ha supuesto casi 3.438.000 viajeros, con una caída del 2,4% respecto al mismo mes de 2018.

Además, en julio bajó el mercado alemán un 3,5%, aunque los más de 1.370. 600 viajeros germanos hacen que sigan siendo el mayoritario en el aeropuerto. En segundo lugar se sitúa el Reino Unido, que crece un 2,3% (unos 888.600 pasajeros). Mientras tanto, sube el pasaje nacional un 8,2% (más de 768.300 viajeros). También se destaca que sube el mercado italiano un 6,1%.

En el cómputo global, de enero a julio, han circulado por Son Sant Joan 16,7 millones, lo que supone un 4,2% respecto al mismo periodo de 2018, con más de 123.800 aterrizajes y despegues, que aumentan el 1,3%.

A nivel nacional, los aeropuertos han batido otro récord al alcanzarse 29,4 millones de viajeros, con un crecimiento del 3,4% respecto a julio de 2018.

El aeródromo mallorquín se mantiene como el tercero con más pasajeros. El de Barajas está a la cabeza, con más de 5,9 millones -sube un 7,5%-, seguido por el de Barcelona, que registra 5,3 millones de viajeros, con una subida del 3,8%.

"Sin sostenibilidad"

Desde el Cercle Mallorquí de Negocis se critica "la apuesta por el crecimiento" del aeropuerto "por encima de todo". "Aena sostiene que el tráfico no sube mucho en temporada alta, pero lo hace sobre picos altísimos". Se considera que se deja de lado la sostenibilidad en los incentivos a las aerolíneas en temporada baja, cuando pagan tarifas un 20% más baratas, sin valorar otros criterios, como que los aviones contaminen menos.