Los pasajeros de la compañía Vueling que ayer embarcaron en Sevilla y despegaron a las 15.35 horas rumbo a Ibiza, donde debían aterrizar previsiblemente una hora y media después, lo han hecho finalmente esta tarde a las 15.46 horas, exactamente un día después de lo previsto.

Cuando el vuelo VY2424 ya había despegado del aeropuerto de Sevilla, el comandante advirtió a los pasajeros de que, debido a un problema técnico a bordo, debían aterrizar en Alicante. A las 16.30 horas del sábado tomaron tierra y vieron cómo un camión de bomberos se acercaba al avión y estacionaba a pocos metros de él, sin que ninguno de los viajeros recibiera información sobre de qué avería se trataba.

Varios de los pasajeros de ese vuelo pudieron volar ayer hacia ibiza, pero otros no. Estos últimos fueron alojados en un hotel de Murcia, donde llegaron en taxi, pagado por la compañía aérea, al igual que el alojamiento. Esta mañana volvieron al aeropuerto de Alicante, donde tomaron el vuelo VY1307 de las 12.10 destino a Barcelona y de allí a las 15.10 volaron a Ibiza, donde aterrizaron a las 15.46.

Paco García Crespo es uno de los pasajeros que viajaba con su hija en ese avión que volaba de Sevilla a Ibiza para pasar cinco días de vacaciones en la isla.

Recién llegado al aeropuerto de Ibiza, explica a Diario de Ibiza que, además de haber perdido un día de vacaciones, "cuando hemos ido en la propia terminal a recoger el vehículo de alquiler que teníamos pagado nos han comunicado que lo hemos perdido, al igual que el dinero, así que tengo que alquilar otro por más del doble". El calvario de Paco García no acaba aquí. En uno de los trayectos se ha extraviado parte de su equipaje, donde llevaba la documentación para poder alquilar otro vehículo.

"Aún no sé cómo lo solucionaremos", excplica ya muy cansado desde el aeropuerto de Ibiza.