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Movilidad

Protestas por la masificación de los buses de las zonas turísticas

La conselleria de Movilidad admite retrasos de más de 15 minutos en las salidas por las colas de usuarios

Imagen tomada ayer por una usuaria ante la avería registrada por uno de los autocares en Cala Major.

La masificación de los autocares que cubren el servicio de transporte regular por carretera de la isla, especialmente en el caso de los vinculados a las zonas turísticas, está multiplicando las quejas de los usuarios, que en muchos casos achacan el problema a una oferta insuficiente de plazas y frecuencias. El problema es reconocido desde la propia conselleria de Movilidad, desde la que se lamenta que el fuerte número de usuarios en esas líneas durante el verano, sumado al hecho de que los conductores se ocupan de cobrar los billetes que los turistas suelen pagar en efectivo, está generando que en algunas paradas se tarde más de 15 minutos en poder efectuar la salida.

Este es uno de los temas que se pretende afrontar con el nuevo diseño de la red de transporte regular por carretera, que va a conllevar un aumento del 50% en las frecuencias, una renovación de la totalidad de la flota de autocares y la implantación de un sistema de pago en el que será posible la utilización de tarjetas de crédito, según destacó el director general de Transportes, Jaume Mateu.

Hay que tener en cuenta que las quejas formuladas por los usuarios plantean la insuficiencia de los servicios programados para atender las necesidades no solo de los visitantes, sino muy especialmente de los residentes, y también las averías que registran los vehículos con los que se cubren estas rutas, como en el caso de las de Calvià.

El conseller de Movilidad, Marc Pons, precisamente anunció ayer que han quedado adjudicadas las tres nuevas concesiones en las que se ha dividido Mallorca para la prestación de este servicio en el futuro, aunque pendientes de los recursos presentados por las empresas que han sido rechazadas.

En concreto la zona 1, que agrupa el Ponent de la isla, e incorpora municipios como Calvià o Andratx, pasará a ser atendida por la empresa Moventis Mallorca (en la que participa el transportista local Seco Rodríguez). La zona 2, del norte (de Valldemossa a Can Picafort), quedará en manos de la empresa Martín. La zona 3, de Llevant y Migjorn, se ha adjudicado a Barcelona Transport, en la que participa autocares Caldentey.

Verano de 2020

Aunque el conseller no quiso comprometerse sobre la fecha exacta en la que podrán operar plenamente estos nuevos concesionarios, afirmó que se está trabajando para intentar que el nuevo servicio pueda estar plenamente operativo durante la próxima temporada turística.

Sin embargo, subrayó que todo este proceso acumula ya varios meses de retraso debido a que las empresas que han quedado eliminadas durante el concurso han recurrido por sistema estas decisiones.

En este sentido, recordó que lo que está en juego son unas concesiones para diez años, prorrogables por otros cinco, por un valor de 479 millones de euros, lo que ha provocado que los participantes en el concurso de adjudicación "hayan jugado muy fuerte" y recurrido por sistema ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales.

Incluso la empresa Transabus, que había presentado la mejor oferta económica en dos de los lotes antes señalados (el 1 y el 3), fue eliminada al considerar la mesa de contratación que había incurrido en baja temeraria.

Marc Pons puso de relieve la dificultad que ha supuesto poner en marcha todo este proceso y puso en valor el que se haya entrado ya en la fase final, ante la esperanza de que antes de que acabe el año se puedan firmar los contratos con las nuevas concesionarias.

Un punto que el conseller de Movilidad puso de relieve es que el 95% de la nueva flota de autocares será de gas o eléctrica, y muchos de ellos adaptados para las personas con problemas de movilidad.

Nuevas tarifas que potenciarán la fidelidad

El nuevo sistema de tarifas que se va a implantar contempla mayores facilidades para el pago con el fin de evitar colas, y los precios serán variables, de forma que cuanto más se utilice el transporte público, más económico resultará con el objetivo de fidelizar a los usuarios, según destacó el conseller de Movilidad, Marc Pons. Además, se facilitará el que con un mismo billete se pueda hacer uso de diferentes medios de transporte.

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