Madrid confirma la gravedad de la situación de las cuentas de Balears. El Ministerio de Hacienda cifra en 417 millones el agujero que se ha ido acumulando en los últimos meses en los presupuestos del Govern. Una desviación de los gastos y de los ingresos con la que, apenas transcurrido medio año, las islas ya superan ampliamente el límite de déficit fijado por el Gobierno central y que coloca al archipielágo como la comunidad autónoma con mayor déficit en lo que llevamos de 2019.

Según los datos de Hacienda, al cierre de mayo de 2019 y en virtud de la ejecución presupuestaria del Govern, el déficit de Balears alcanzaba ya la cifra de 417 millones. Un desajuste difícil de corregir y que promete seguir creciendo todavía a falta de medio año y sin previsiones de que lleguen algunos de los ingresos pendientes por la falta de Gobierno central.

En apenas medio año, el Govern pulveriza el objetivo de déficit y, aún en el mejor de los casos, se aleja de poder cumplir con los objetivos de estabilidad presupuestaria, puesto que el objetivo de déficit para las comunidades estaba fijado para 2019 en el 0,1 por ciento, superando el 1,27 por ciento. Cifra que mantendría a las islas bajo la lupa del Ministerio y de la Autoridad Fiscal Independiente el próximo año, después de haberle exigido ya ajustes para el actual y el próximo ejercicio.

La cifra seguirá subiendo

En los 417 millones ya quedan reflejados los 177 millones de la mejora de la financiación autonómica y una mensualidad del IVA pendientes de pago por la prórroga de los presupuestos y por la falta de Gobierno o los 180 millones del convenio de carreteras incluidos en las cuentas autonómicas y de los que no hay rastro ni en las cuentas prorrogadas ni tampoco en las que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó y no llegó a poder aprobar.

Los 60 millones restantes que conforman el agujero vienen originados por la caída de la recaudación hasta la fecha y por un aumento de gasto que desde la conselleria de Hacienda atribuyen al pago de sentencias en el primer semestre del presente ejercicio. Cabe recordar que, tal y como informaba este diario la pasada semana, la caída en la recaudación de impuestos con el de transmisiones patrimoniales en casi un 6 por ciento en los primeros cinco meses, amenaza con un agujero de cerca de 100 millones. A la vista de la desviación hasta la fecha, la cifra se antoja hoy superior.

De hecho, si bien de desbloquearse la situación política en Madrid, formarse un nuevo Gobierno y llegando la mejora de la financiación se rebajaría el agujero a 240 millones, la desaceleración de la economía y la consecuente caída tributaria promete incrementar esa cifra.

De este modo, salvo drásticos recortes en las cuentas del Govern, Balears acabará el año con un agujero que oscilará entre los 300 y los 500 millones, dependiendo de si llegan o no los recursos pendientes de la situación en Madrid.

La semana pasada, la AIReF ya alertaba del alto riesgo de incumplimiento por parte de Balears de los objetivos de estabilidad, apuntando a la caída de la recaudación y al incremento del gasto.

Esta situación se suma al incumplimiento del techo de gasto a final del pasado 2018 que obliga a un ajuste de 210 millones en las cuentas de este año y por la que el Govern está preparando un Plan de Equilibrio Financiero que deberá incluir recortes tanto para este año como medidas de contención del gasto en los presupuestos de 2020 que el ejecutivo autonómico no ha hecho más que empezar a trabajar en su elaboración que deberá hacer a ciegas a falta de la información contable que debe facilitarle Madrid, por la falta de Gobierno.

Desde hace dos semanas la conselleria de Rosario Sánchez bloqueó partidas presupuestarias de las distintas consellerias con el objetivo de contener el gasto mientras se elabora el plan financiero,que el Govern deberá presentar al Ministerio de Hacienda y a la AIReF en las próximas semanas.

A la cabeza de las autonomías en déficit

Los 417 millones de euros que Balears acumula de déficit en medio año la sitúa, y con diferencia, como la comunidad con mayor desviación entre sus gastos y sus ingresos. El 1,27 por ciento de déficit sobre su producto interior bruto la convierten en la primera de un ranking, en la que le siguen Extremadura, que todavía no llega al 1 por ciento (0,97) y Murcia con un 0,84 por ciento. En el extremo opuesto se encuentran Asturias y La Rioja, que en los seis primeros meses presentan superávit. No obstante, salvo estas últimas autonomías, todas incumplen ya el objetivo de déficit. Todas están pendientes de recibir la mejora de la financiación por el bloqueo en Madrid.

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