La economía balear ha crecido un 2% durante el primer trimestre de este año, lo que consolida la senda de desaceleración registrada durante el ejercicio anterior, según consta en el informe económico presentado ayer por la patronal CAEB. Hay que recordar que esa tasa era del 2,2% durante el último trimestre de 2018, y el crecimiento medio de ese ejercicio se cifró en un 2,7%.
Según esta organización empresarial, el sector servicios se ha situado en un incremento del 2%, la industria del 1% y la construcción en un 4,3%, siendo este último sector el que ha mostrado la mayor pérdida de velocidad respecto al último trimestre del pasado ejercicio, pero es también el que mantiene la tasa más alta.
Un elemento a destacar es que aunque todos los sectores crecen, todos pierden también velocidad, ya que los servicios crecían a un ritmo del 2,2% durante el último trimestre de 2018, la construcción lo hizo un 4,8% y la industria un 1,2%.
Por lo que respecta al consumo privado, también se desacelera y muestra un crecimiento del 1,8% frente al 2% del último tramo del año pasado, mientras que la inversión de las empresas mantiene un ritmo más estable y potente, del 3,5%, siendo ésta uno de los elementos en los que se sustenta el actual crecimiento de la economía isleña.
En el caso de los servicios, se achaca su pérdida de velocidad al menor dinamismo registrado en las actividades más directamente vinculadas al turismo y al debilitamiento del consumo privado.
En materia turística, se pone de relieve que aunque la cifra de visitantes ha seguido creciendo, su tiempo de permanencia en Balears se ha reducido considerablemente respecto al ejercicio anterior (hay que tener en cuenta que en 2018 la Semana Santa se celebró en abril).
Consumo familiar y alza salarial
Y en el caso del consumo privado, se recuerda que también el ritmo de creación de empleo está perdiendo fuerza, lo que influye sobre el gasto de los hogares, aunque se reconoce que "este efecto se está viendo mitigado en parte gracias al aumento de los salarios" que se está dando en el archipiélago.
Por lo que respecta a la construcción, es la que muestra la desaceleración más acentuada pero es también la que mantiene el crecimiento más potente debido a que se trata de una actividad que todavía está en proceso de recuperación tras la crisis.
CAEB había previsto que a lo largo de 2019 la economía balear crecería un 2%, pero dado que esta tasa se ha alcanzado ya en el primer trimestre, se admite una mayor cautela a la hora de hacer nuevas previsiones a la espera de constatar la evolución a lo largo de los restantes trimestres. En cualquier caso, hay otro aspecto que la patronal balear subraya: aunque la pérdida de velocidad se mantiene, ésta es cada vez más moderada, lo que significa que el crecimiento económico parece tender a estabilizarse en las proximidades del 2% actual.
Hay que recordar que el Govern ha fijado el crecimiento del primer trimestre de este año en un 2,2%, y ha revisado ligeramente a la baja su previsión para todo 2019 para situarla en un 2,5%.
Ante esta pérdida de velocidad, la presidenta de CAEB, Carmen Planas, ha reclamado un gran pacto público-privado para la transformación y modernización de la economía balear, con el fin de reforzar su senda de crecimiento.
En concreto, ha advertido de que "la actual coyuntura económica no está exenta de riesgos", lo que hace aún más necesario que "Balears aborde las reformas estructurales que permitan aumentar la resiliencia ante factores externos", como un brexit duro, las tensiones comerciales o el precio del petróleo.
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