El Servei de Salut condenó enérgicamente el intento de agresión que sufrieron ayer dos técnicos de emergencias de una UVI móvil cuando finalizaban un servicio en el hospital de Son Espases. Los dos profesionales presenciaron una pelea entre dos personas que estaban acompañadas de menores y, cuando trataron de separarlas, una de ellas les amenazó con un cuchillo.

Finalmente, pudieron reducirla hasta la llegada de la Policía Nacional. El Servei de Salut activó el protocolo para estos casos que prevé asistencia sanitaria y apoyo jurídico y psicológico a los profesionales involucrados. La reforma del Código penal de 2015 considera autoridad al personal sanitario y prevé condenas de hasta cuatro años en caso de agresión.