La crisis que atraviesa Ciudadanos en Balears desborda a la secretaria de Organización del partido, Joana Capó. La número dos de la formación cedió ayer a la exigencia de los críticos de disolver la cúpula de Cs en Palma y convocar primarias para la elección de sus nuevos miembros de la ejecutiva. Una votación a la que se negaba y por la que llegó a tildar de "200 frikis" a su militancia y a la que finalmente se ve abocada para evitar su propia caída. Con esta decisión evita la asamblea prevista para mañana en la que un amplio sector de las bases planeaban forzar su dimisión.

Capó y lo que queda de la junta local de Ciudadanos en Palma acordaron ayer en una reunión extraordinaria la disolución de la cúpula del partido en la capital y, con ello, la convocatoria de primarias para elegir a los nuevos miembros, después de que la cascada de dimisiones en este órgano lo dejaran por debajo del cincuenta por ciento de sus integrantes. Pese a que esta última circunstancia ya obligaba desde hace semanas a esta disolución, la número dos del partido, la secretaria de organización Joana Capó, se negaba con el pretexto de "no generar inestabilidad". Fue, precisamente, justificando su oposición a las primarias donde llamó "frikis" a sus bases, como reveló un audio del que informó este diario.

Después de la publicación del audio, Capó convocó a las bases a dos asambleas. La primera, la semana pasada, en la que se evidenció la absoluta división entre la militancia y la cúpula, y donde ni tan siquiera se pudo votar la propuesta presentada por la dirección para recomponer la junta de Palma y evitar las primarias. Fue un encuentro con mucha tensión y se evidenció la profunda crisis que atraviesa la formación naranja, especialmente en Palma.

La segunda asamblea iba a tener lugar este miércoles y el sector crítico del partido planeaba aprovecharla para forzar la dimisión de la secretaria de organización, a la que consideran responsable de generar la división interna que vive el partido de Albert Rivera en Balears desde hace semanas.

Joana Capó salva su cabeza

Según fuentes de la formación, algunos cargos electos de la formación meditaban dar su apoyo a la iniciativa de los críticos de pedir la dimisión de Joana Capó, lo que habría ahondado la brecha interna en la formación naranja. Sin embargo, con la convocatoria de primarias, tal y como se informó ayer a la militancia, la asamblea de mañana queda desconvocada, lo que permite a la número dos ganar tiempo y evitar su caída.

De momento, pese a la disolución de la junta y la convocatoria de primarias, todavía no se ha puesto fecha a este proceso. "En breve se enviará la convocatoria, en fecha y forma, de las elecciones a la Junta como así marcan los estatutos de Ciudadanos", se comunicó a las bases.

La crisis de Ciudadanos en Balears colea desde las primarias de la formación cuando Pérez-Ribas se impuso a Xavier Pericay y Capó y el coordinador en Palma, Pedro Miró, tomaron las riendas del partido y conformaron las listas.

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