Ciudadanos no logra cerrar la crisis interna que vive en Palma. La cúpula del partido de Albert Rivera topó ayer contra sus bases en su intento por reorganizar la agrupación en la capital. La propuesta de un nuevo miembro que trajo la dirección ni tan sólo pudo ser votada por la presión de la militancia en una tensa asamblea en la que algunos afiliados llegaron a enfrentarse a la secretaria de Organización, Joana Capó, quien, como desveló un audio, les llamó "frikis" en una reunión de la formación.

Medio centenar de miembros del partido, entre los que se encontraban algunos de los rostros de Cs en Parlament y Consell, Marc Pérez-Ribas y Beatriz Camiña, acudieron ayer por la tarde a la sede de la formación a la asamblea convocada de urgencia el mismo día que este diario publicó el contenido de los audios en la que la secretaria de Organización del partido tildaba de "200 frikis" a las bases en Palma. El objetivo de la cita era zanjar la crisis que atraviesa Ciudadanos en Palma después de la cascada de dimisiones en la junta local con la elección de un nuevo miembro.

El nombre de Teodoro Serra propuesto por lo que queda de la junta de Palma, encabezada ahora por María Amezcua (algo de lo que muchos afiliados fueron informados ayer mismo en la asamblea), para cubrir las bajas no llegó ni tan siquiera a ser votado. En un ambiente de tensión y enfrentamiento, las bases recriminaron la falta de transparencia en la votación, forzando a que fuera aplazada a la segunda asamblea convocada, prevista la próxima semana.

"¿Qué, tienes miedo a que te graben?"

Pese a que todas las miradas estaban puestas en la secretaria de Organización, Joana Capó, el encargado de defender la línea oficialista fue el secretario de la agrupación de Palma, Miquel Busquets, mientras que Capó no llegó a intervenir, lo que le recriminaron algunos afiliados: "¿Qué, tienes miedo a que te graben?", le llegaron a espetar, según explican diferentes asistentes a la asamblea.

En relación al audio de Capó, incluso hubo un militante que acudió a la asamblea con una camiseta con el mensaje "Yo soy friki".

Con todo, la asamblea exhibió una total división entre los distintos sectores del partido, con una parte abogando por una total renovación de los órganos y otra sólo queriendo cubrir las dimisiones.

El sector crítico del partido incluso llegó a recoger firmas de apoyo para denunciar la situación que atraviesa la formación en la junta de Palma al Comité de Garantías de la formación en Madrid.

La crisis que atraviesa Ciudadanos en Balears colea desde las primarias de la formación cuando Pérez-Ribas se impuso a Xavier Pericay y la secretaria de Organización, Joana Capó, y el coordinador del partido en Palma, Pedro Miró, tomaron las riendas del partido y conformaron las listas.

Sin embargo, lo que ha hecho aflorar la tensión interna ha sido la recomposición de la principal agrupación del partido, la de Palma, después de una cascada de dimisiones. Una situación que dejó a la luz un audio de tres horas de una reunión interna a la que tuvo acceso este diario. "Esto es una junta de siete frikis en una agrupación de 200 frikis", se refiere la secretaria de Organización del partido a sus bases en la citada grabación, para alertar sobre el riesgo de renovar la dirección del partido en la capital: "No podemos generar más inestabilidad". Pese al malestar generado, la propia Capó aseguraba la semana pasada a este diario que no planea dimitir.

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