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Economía

La deuda de los baleares crece por primera vez durante la última década

Los créditos vivos con los bancos de las islas aumentan en 817 millones de euros en un año y alcanzan un valor de 29.680 millones

La deuda de los baleares crece pero también el ahorro de familias y empresas. Bloomberg

Las familias y empresas de Balears llevan desde 2010 reduciendo sus deudas con los bancos en un intento de sanear sus cuentas. Sin embargo, esta tendencia se ha roto durante el primer trimestre del presente ejercicio, y el valor de los créditos pendientes de pago a las entidades financieras se ha incrementado en 817 millones de euros respecto al pasado año. Este cambio de tendencia, que se registra al mismo tiempo en el que el ahorro balear sigue creciendo, no es negativo, según destacan los expertos, y es el reflejo principalmente del aumento que se está registrando en la inversión que realizan las empresas, prueba a su vez de que las expectativas de la economía del archipiélago son positivas.

Los datos facilitados por el Banco de España cifran en 29.680 millones la deuda que los baleares tienen con las entidades financieras, importe que doce meses atrás era de 28.863 millones. Pese a este repunte y al cambio de tendencia antes señalado, hay que destacar que el valor de los créditos se mantiene muy por debajo del que alcanzó en 2009, cuando la crisis económica comenzaba a dar sus primeros zarpazos, ya que en esas fechas alcanzó un valor de 46.661 millones de euros, todavía bajo los efectos de la resaca del boom inmobiliario.

El director de la Fundación Impulsa y catedrático de Economía Aplicada de la Universitat balear, Antoni Riera, señala que tras años saneando sus cuentas (con descensos en el endeudamiento y aumentos en el ahorro) los baleares, y muy especialmente las empresas, han abierto una fase de mayor endeudamiento, sobre todo para financiar inversiones. Este cambio de ciclo, según Riera, no es en absoluto negativo, y refleja además un factor a tener muy en cuenta: los empresarios apuestan por invertir en mejoras en sus negocios porque las expectativas que manejan sobre la marcha de la economía de las islas son positivas y existe el convencimiento de que van a poder recuperar esas cantidades en un plazo prudente.

Ahorro al alza

Además, hay que tener muy en cuenta que aunque la deuda ha aumentado en el último año, también lo ha hecho el ahorro. El valor de los depósitos en los bancos de las islas se ha situado durante el primer trimestre de este año en los 25.566 millones de euros, lo que supone un crecimiento de 1.986 millones respecto al mismo periodo de 2018.

Antoni Riera pone en valor no solo ese aumento del ahorro, sino muy especialmente el equilibrio que se ha alcanzado con la deuda, lo que refleja el esfuerzo de saneamiento de sus cuentas que han hecho tanto el sector empresarial como las familias.

Porque en 2007 la tasa llegó a ser de 2,5 euros de deuda por cada euro depositado en las entidades financieras de las islas, una proporción que refleja el gravísimo apalancamiento que se llego a alcanzar en las islas. En estos momentos, la proporción es de algo más de 1,1 euros en créditos por cada uno en depósitos bancario, y ello teniendo en cuenta que en estos últimos no incluyen el ahorro destinado a planes de jubilación o fondos de inversión.

El ahorro de los baleares cambia su perfil a causa de los bajos intereses

Los ciudadanos de Balears ahorran ahora más que antes de la crisis, cuando el consumo estaba disparado. El valor de los depósitos en los bancos de las islas era en 2008 de 19.148 millones de euros y siguió creciendo hasta alcanzar en 2010 los 21.138 millones, momento en que inició su caída hasta situarse por debajo de los 18.000 millones durante el primer trimestre de 2012. Ahora alcanza los 25.566 millones de euros.

Pero la diferencia con lo que sucedía antes de la crisis no se limita a la cantidad de ahorro, que durante el último año ha alcanzado máximos históricos, sino también a su perfil.

Los particulares de las islas (se excluye a las Administraciones públicas) tienen 3.132 millones de euros depositados en cuentas de plazo fijo, que tradicionalmente habían sido una fórmula de ahorro mayoritario pero que durante los últimos años se ha abandonado por los bajísimos intereses que se abonan. Por contra, en las cuentas a la vista hay 20.948 millones, que aunque no paga intereses al menos ofrece liquidez.

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