La primera jornada de negociaciones en Més para pactar los nombres de consenso que ocupen dos conselleries en el próximo Govern se saldó con un fracaso. "Las cosas están muy mal. Va a ser difícil encontrar una solución con tanta tensión", indicaron ayer fuentes cercanas a la negociación. Algunos dirigentes se vieron en una reunión en la que intermedió el exalcalde de Palma, Antoni Noguera. En paralelo hubo diversas llamadas telefónicas, pero la creciente tensión aconsejó suspender las conversaciones y reanudarlas hoy.

Antoni Alorda, señalado como el autor intelectual del plan para descabalgar a Fina Santiago y a Vicenç Vidal de las conselleries de Servicios Sociales y Medio Ambiente respectivamente, defendió ayer su estrategia y planteó que Santiago asuma el papel de portavoz parlamentaria. "Fina Santiago es uno de los grandes valores de Més. Es indiscutible. La mejor consellera de Bienestar Social. Proponerla de portavoz parlamentaria para marcar línea no lo desmiente, lo subraya", indicó Alorda en una conversación en Twitter con el periodista de Ib3 Ràdio Rafel Gallego.

El deseo de los dirigentes de Més es llegar a la asamblea de mañana con dos nombres de consenso que se integren en el Govern y evitar una guerra civil justo cuando eche a andar la legislatura. Una de las propuestas que más fuerza ha cogido es pactar una solución mixta: o salvar a Santiago, o salvar a Vidal.

En cambio está descartado que Miquel Ensenyat vaya a ser propuesto como senador autonómico. De hecho, el cabeza de cartel de Més en las autonómicas puede quedarse como diputado raso si finalmente Santiago fuera elegida portavoz parlamentaria.

La exconsellera de Servicios Sociales no estuvo directamente involucrada en los contactos y reuniones celebrados ayer. Tampoco Vidal ni Ensenyat, pero sí personas de su entorno cercano que tratan de influir para conseguirles una buena salida.

La tensión es manifiesta en Més, hasta el punto de que hay amenaza de ruptura. Biel Barceló, vicepresidente del pasado Govern hasta que tuvo que dimitir por un viaje a Punta Cana, trató sin éxito de apaciguar los ánimos en diferentes conversaciones.

Crece el enfado y el desconcierto en la militancia de Més a medida que se conocen más detalles sobre la cena que mantuvo la cúpula del partido en Llubí la noche de San Juan y en el que los coordinadores Bel Busquets y Guillem Balboa decidieron vetar a Santiago, Vidal y Ensenyat pese a que días antes la formación había aprobado sus nombramientos. Alorda fue el instigador de aquella reunión a la que también asistió el ahora defenestrado Ensenyat.

Més espera llegar a la asamblea de mañana con un acuerdo de mínimos que cierre algunas heridas y completar el organigrama del Govern. En todo caso, se da por hecho que Busquets y Balboa caerán en un congreso extraordinario después del verano.