La adicción al juego, gracias en parte al gran número de locales que permiten esta actividad, es uno de los problemas que se tratan en Projecte Home a través de programas específicos. Según los responsables de la organización, en los últimos años, al menos en Balears, tampoco se ha detectado un gran número de adictos a los juegos de azar o en el uso abusivo tanto de teléfonos móviles, como de los videojuegos. Sin embargo, según explicó Jesús Mullor, a diferencia de la cocaína que el consumidor de inmediato se da cuenta de su adicción, en el caso del juego o del abuso de los aparatos electrónicos no ocurre lo mismo. Estas personas que arrastran estas conductas no suelen aceptar que también son adictos, por lo que la mayoría tarda mucho tiempo en acudir en busca de ayuda.

Además, según señalaron los responsables de Projecte Home, estos ludópatas que acuden a la organización, también arrastran otros problemas asociados como es el consumo de alcohol o, incluso, de drogas. En Balears la cifra de apostantes online también se ha estabilizado y es parecida a la de los últimos años. El patrón que se observa en estos adictos es parecido al del cocainómano.