Més evita cerrar la puerta a entrar en el Govern. Las bases de los ecosoberanistas rechazaron prácticamente sin fisuras la oferta del PSOE de sólo mantener Servicios Sociales y Medio Ambiente, pero lejos de tomar una decisión en firme sobre su participación en el nuevo Ejecutivo autonómico, dejaron la puerta abierta a la espera de una nueva oferta de los socialistas. "Estaremos con las orejas bien abiertas para escuchar nuevas propuestas", concluyó ayer al cierre de una asamblea que prometía ser clave la coordinadora de la formación, Bel Busquets.

Más de 250 miembros de Més participaron ayer en una asamblea que sirvió para dar una imagen de unidad en las filas ecosoberanistas y para rearmar al equipo negociador del partido en la mesa del pacto con PSOE y Podemos. Desde un inicio el resultado estuvo claro y la votación no hizo más que confirmar la expresión mayoritaria de las bases del partido durante toda la asamblea: la propuesta de los socialistas, que ni tan solo fue defendida por los negociadores, fue rechazada por 148 votos y ocho abstenciones.

"La oferta es insuficiente y así lo ha expresado la asamblea", resumía la coordinadora del partido Bel Busquets las cerca de tres horas que duró el debate interno de la formación. "No asumimos la propuesta que nos ha hecho el PSIB hasta este momento, que es lo único que tenemos en la mesa con cara y ojos", explicó Busquets para, no obstante, avisar que "Més estará con las orejas abiertas para escuchar una nueva propuesta".

"Un 'no' a esta propuesta"

En esta línea, si bien la asamblea debía servir inicialmente para decidir si Més debía entrar o no en el Govern, la votación se ciñó a la oferta de los socialistas. "Es un 'no' a esta propuesta", aclaró Busquets, insistiendo en que en las filas ecosoberanistas siguen "abiertos a recibir más propuestas" y dispuestos a seguir negociando.

En la asamblea los negociadores explicaron el desarrollo de la negociación y la oferta de reparto de cargos hecha por el PSOE: la conselleria de Servicios Sociales, la de Medio Ambiente -ahora sin Agricultura y Pesca, que sería para Podemos- y uno de los dos cargos unipersonales que quedan por repartir: o la presidencia del Parlament o el senador autonómico.

En la misma línea que ya habían expresado los negociadores al salir de la reunión el lunes y como había ratificado la cúpula del partido, la mayoría de intervenciones fue contundente al rechazar la oferta. Sólo algunas voces -presumiblemente quienes acabaron decantándose por la abstención- expresaron sus dudas sobre el 'no' a la oferta tras los resultados del 26 de mayo. Sin embargo, entre las voces que defendieron el 'no' a la oferta, muchos abogaban por cerrar definitivamente la puerta a la entrada al Govern y pasar a negociar directamente un acuerdo de investidura y otros, incluso, llegaron a proponer no apoyar la investidura. Sin embargo, ayer sólo se votaba si se aceptaba o no la oferta puesta sobre la mesa por los socialistas.

Seguirán las negociaciones

Los negociadores de Més esperan recibir ahora una nueva oferta de los socialistas que se acerque más a sus pretensiones para entrar en el Govern. Pese a que ayer al concluir la asamblea todavía no habían sido citados para hoy, daban por hecho que deberán reunirse para negociar a contrareloj la composición de la mesa del Parlament que se constituirá mañana, y que deberá adjudicar la primera pieza en disputa en el reparto institucional del nuevo pacto: la presidencia del Parlament.

Tal y como recordaba Busquets ante los medios al finalizar la asamblea, después de la constitución de la cámara quedarán otros quince días para negociar antes de la investidura de Francina Armengol como presidenta.

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