Balears, junto a Cantabria y Murcia, ha registrado durante el primer trimestre de 2019 una tasa de 6,4 demandas de disolución matrimonial por cada 10.000 habitantes, una cifra que está por encima de la media nacional de 6,3, según los datos recogidos por el Servicio de Estadística del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Más concretamente, del total del trimestre con la población a 1 de enero de 2019, en Baleares los divorcios fueron 709 --427 consensuados y 282 no consensuados--, 28 separaciones --20 consensuados y 8 no-- y 363 modificaciones de medidas, entre otros.

Por lo que respecta a los porcentajes de crecimiento, las separaciones --consensuadas y no-- disminuyeron más de un 25 por ciento en ambos casos, un comportamiento igual que el divorcio consensuado que decreció un 8,2 por ciento frente al crecimiento del 13,3 por ciento del divorcio no consensuado.

Mientras, en el conjunto de España, el número de demandas de disoluciones matrimoniales se incrementaron un 1,2 por ciento en el primer trimestre de 2019 respecto al mismo periodo de 2018.