? El equipo de Emergencias del Ejército envió a más de cien efectivos para que ayudaran en las labores de emergencia y en atención a los ciudadanos que se habían visto sorprendidos por la riada que se llevó por delante varias de las calles más céntricas de Sant Llorenç, destrozando todo lo que se encontró a su paso. Los soldados de esta unidad de emergencias fueron movilizados la misma noche de la riada y llegaron a la isla a primera hora de la mañana, desplegando todos sus efectivos y medios. Con la ayuda de otros efectivos de emergencia los soldados consiguieron localizar a varias de las víctimas que habían desaparecido y que murieron aplastadas por varias toneladas de lodo.