Baleares vuelve a ser el destino más caro en toda España en alquiler turístico tanto en temporada alta como en baja, con unos precios que rondan 276 euros por noche en agosto y 196 euros en septiembre. Esta cifras duplican en verano a las del resto de las comunidades autónomas.
Incluso comparando los precios en temporada baja, los del archipiélago superan a los del resto de regiones en temporada alta, excepto en el País Vasco, según un estudio del buscador Holidu. Además, los quince destinos vacacionales más costosos por noche están en Balearesen Baleares, a excepción de Puerto Banús y San Sebastián.
Los municipios más exclusivos son Santa Eulària des Riu, con 683 euros en temporada alta, y Sant Antoni de Portmany, con 551 euros. En destinos como Andratx o Palma los precios no bajan de 300 euros en agosto y 200 euros en septiembre. Mientras, en Calvià el coste por noche es de 406 euros en temporada alta y de 324 euros en temporada baja y en Can Pastilla 388 euros y 360 respectivamente.
En comparación con destinos europeos, Baleares también supera a Mónaco, Islandia y el Reino Unido, que son los más caros en verano con 359 euros, 230 euros y 209 euros por noche. Y teniendo en cuenta la oferta en otras zonas del Mediterráneo, como Grecia, Chipre o Croacia, en ningún caso se acercan a los 200 euros en temporada alta.
Apartamentos en las islas
Por otro lados las pernoctaciones en apartamentos turísticosen comparación con el mismo mes del año pasado. En Baleares se registraron 9.682 viajeros, de los que más de 7.000 eran extranjeros, que superaron las 57.000 pernoctaciones, con una estancia media de 5,9 días, según datos del INE de la Encuesta de ocupación en alojamientos turísticos extrahoteleros de este martes.
En las islas se estiman 1.573 apartamentos, con 5.446 plazas, de dan empleo a 565 personas. En Palma el número de apartamentos en marzo era de 1.392, con 4.859 plazas.
Más de 15.000 turistas eligieron el alojamiento de turismo rural en sus estancias en el archipiélago, con una estancia media de 3,24 días. En Baleares se contabilizan 288 alojamientos de este tipo con 5.539 plazas, en los que trabajan más de 1.500 personas.
