El voto secreto es una garantía del sistema electoral que impide que un extraño pueda influir en su voto o conocerlo. Sin embargo, puede que el voto no sea tan secreto, ya que en estas elecciones generales las diferentes tonalidades de los sobres que los partidos han enviado a los domicilios hace fácil saber qué sobre ha utilizado el votante si prepara las papeletas en casa.

Especialmente significativo y fácil de ver son los sobres de las votaciones al Senado. El color sepia de las repartidas por el PP, Ciudadanos y el PSOE son diferentes. Las de los populares son de un sepia mucho más fuerte y fácil de distinguir, mientras que la de los socialistas es de un color más amarillento. Ello permite a los interventores de los partidos colocados en las mesas electorales saber si los electores que llevan los sobres de casa los votan o no. También es cierto que puedan cambiar las papeletas y los sobres, pero habitualmente la gente mayor desconocen estas triquiñuelas de los partidos y vota con el sobre que les envían a su domicilio.

Desde los partidos apuntan que ello se debe a las imprentas donde se encargan las papeletas y el tipo de papel. Los envíos masivos de propaganda electoral vía correo a los domicilios son gestionados desde las sedes centrales de los partidos y en muchos casos se contratan vía Gobierno. Lo que ocurre es que una impresión de tantas papeletas y tantas comunidades autónomas es muy difícil atinar con el mismo color.

Tampoco son iguales los sobres del Congreso de los Diputados, pero al ser de color blanco es mucho más difícil advertir las diferencias. Sin embargo, hay muy poca gente que en el Congreso vota un partido y en el Senado a otro.

Apoderados de partidos consultados por este periódico han confirmado que en la mayoría de elecciones en las que han participado tenían instrucciones claras de controlar el color de los sobres para saber si sus votantes acudía a las urnas. Los interventores manejan listas de los votantes de cada mesa y es muy fácil "realizar una pequeña señal y ponerle como más que probable votante".

Asimismo, relataron que en otros comicios se han adjuntado los sobres con un clip que deja marca para poder advertir si han usado sus papeletas.

Este conocimiento de posibles votantes les permite saber a media tarde "cómo vamos" y realizar un cálculo de los resultados, al remitir la información desde los colegios electorales a las sedes de los partidos.