Han sido duras las negociaciones, como reconocen ambas partes, pero finalmente Norwegian ha alcanzado este jueves un acuerdo con los trabajadores afectados por el cierre de la base de Mallorca, que se produjo a inicios de abril y afectó a 38 pilotos y 64 tripulantes de cabina (TCP). La aerolínea les brindará facilidades para su traslado a la base de Barcelona.

Los trabajadores enfrentaban un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y aunque iniciaron el proceso con la compañía noruega con buenas intenciones, se había complicado. Sin embargo, "tras 99 días" de negociaciones", dice, Pedro Hernández, presidente del comité de empresa en Baleares, se ha logrado una solución que celebran tanto la compañía como los pilotos y TCP.

Los trabajadores han estado este jueves prácticamente todo el día en asambleas, explica Hérnández. El acuerdo alcanzado ha sido calificado como "bueno", en palabras de Hernández.

"Han sido muy duro", reconoce sobre las negociaciones. Al final tendrán "un puesto de trabajo en Barcelona y otras medidas paliativas", como billetes y compensaciones económicas para la mudanza, apunta Hernández, delegado de USO en Baleares de TCP y pilotos.

Norwegian por su parte, que califica las negociaciones de estos meses como "constructivas", detalla en un comunicado que el acuerdo se rubricó la noche del miércoles con USO y el SEPLA.

Entre las medidas que menciona la aerolínea para minimizar "en la medida de lo posible, el impacto del cierre de la base", figuran el cambio en las pautas de trabajo, beneficios sociales, compensaciones por mudanza y facilidades en las suspensiones de contrato, las reducciones de la jornada laboral y la solicitud de excedencias voluntarias. Además, se les ha ofrecido la posibilidad de cambiar de base operativa y de flota de acuerdo con las condiciones específicas establecidas en el acuerdo.

Norwegian considera que el acuerdo es positivo para todas las partes involucradas y cree oportuno reconocer a USO y SEPLA por el resultado obtenido.

Por otro lado, este jueves la compañía ha dado a conocer los resultados económicos del primer trimestre, que se cierra con una pérdida de 155 millones de euros. Mientras, los ingresos se incrementaron en un 14% en comparación con el primer trimestre de 2018, llegando a los 832 millones de euros. De estos, 116 millones se originaron en España (un 13%), que sigue siendo el tercer mercado de la compañía por ingresos, por detrás de Noruega y Estados Unidos. La aerolínea ha reducido los costes, excluido el combustible, en un 8%.

Entre enero y marzo han volado con Norwegian 8,12 millones de pasajeros, un 9% más, con una ocupación media del 81%.

La compañía noruega, además, ha tenido que afrontar la crisis de los Boeing 737 MAX , que tras el accidente en marzo de un avión de ese modelo de Ethiopian Airlines, en el que fallecieron sus 157 ocupantes, han tenido que dejar de volar mientras se revisan. Norwegian tiene 18 de estos aparatos.