La jueza Felisa Vidal, que en el Tribunal Superior de Justicia de Baleares investiga el caso Móviles, los presuntos delitos atribuidos al juez Miquel Florit y al fiscal anticorrupción Juan Carrau en una pieza separada del caso Cursach, ha ordenado la práctica, el próximo 13 de mayo, de una prueba pericial policial para determinar si los teléfonos de los periodistas Kiko Mestre y Blanca Pou fueron examinados en las horas que estuvieron bajo custodia policial.
Vidal ha dispuesto que sea la Policía Científica de la Jefatura Superior de Baleares la que se encargue de esa prueba pericial y a la diligencia podrán asistir los dueños de los aparatos y sus representantes. También estará presente la secretaria de la sala de lo Civil y de lo Penal del TSJB.
La Policía Judicial confiscó el pasado 11 de diciembre los teléfonos de los dos redactores que investigaban el caso Cursach y con el apoyo de un auto del juez Florit, dictado en una pieza separada para descubrir qué funcionarios públicos estaban suministrando información reservada de esa presunta trama de corrupción a la prensa.
Los aparatos fueron dejados bajo custodia de la Policía Judicial entre el mediodía del día 11 y las 10 de la mañana siguiente, hora en que los inspectores encargados del caso de revelación de secretos los llevaron al juzgado de instrucción 12 por orden de Florit.
Los inspectores sostienen que ellos no abrieron esos móviles, aunque Blanca Pou aseguró ante Felisa Vidal que cuando le confiscaron su aparato, los agentes estuvieron toqueteándolo y pudieron acceder a algunas aplicaciones.
Diario de Mallorca y Europa Press, los medios para los que trabajan Mestre y Pou, interpusieron una querella contra Florit (que luego fue ampliada a Carrau) por los presuntos delitos de prevaricación judicial, contra el derecho a la información en su vertiente del secreto de las fuentes, contra la inviolabilidad de domicilio y por supuesta interceptación ilegal de comunicaciones.
En la querella solo está investigado Florit, pero el Tribunal Supremo deberá decidir si la causa se sigue también contra Carrau, al que exculpó la sala de lo Civil y de lo Penal del TSJB.
