Empresarios y testigos que han denunciado haber sido víctimas de las actuaciones supuestamente ilegales dirigidas por el empresario Bartolomé Cursach, se han unido en una asociación, que ya ha sido registrada en el Govern. Se trata de la Asociación de Víctimas del caso Cursach, que encabeza el empresario Bruno da Silva, uno de los principales testigos del caso.

Esta asociación se ha creado en respuesta a las últimas actuaciones de la Policía, que se ha dedicado a investigar y detener a los agentes del Grupo de Blanqueo que realizaron la investigación sobre los negocios del empresario, así como ante la grave acusación que han dedicado al juez Penalva y al fiscal Subirán, a los que acusan de formar parte de una organización criminal. Además de la inscripción oficial de dicha asociación, la primera actuación pública de protesta se realizará el próximo día 24 de abril en Palma.

Los testigos que se sienten víctimas de las actuaciones del poderoso empresario se concentrarán frente a la delegación de Hacienda, en la calle Cecilio Metelo. Se ha realizado un cartel en el que aparecen, además del anagrama de Hacienda, las imágenes de Bartolomé Cursach y de su principal directivo, Bartolomé Sbert, que son los que han impulsado la denuncia por un presunto delito de revelación de secretos, que ha justificado las actuaciones policiales contra los antiguos integrantes del Grupo de Blanqueo.

Estos perjudicados se han sentido respaldados por las actuaciones de los investigadores a los que ahora se cuestiona y aseguran que nunca recibieron ninguna indicación, y mucho menos algún tipo de presión, para que declararan en un sentido u otro. Es decir, sostienen que el juez Penalva y el fiscal Subirán siempre les insistieron en que debían declarar la verdad, ya que todas las pruebas que aportaran serían utilizadas en el juicio. Los perjudicados están convencidos de que las últimas actuaciones policiales responden a un conflicto interno entre distintos grupos de Jefatura.