La sala de lo Civil y de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJB) dictó ayer un auto en el que rechaza asumir la investigación del caso por presunta revelación de secretos que está instruyendo el juez Miquel Florit y también deniega, por ahora, abrir una causa contra el magistrado Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán, a los que la Policía Judicial imputa un rosario de delitos relacionados con la instrucción del caso Cursach, la presunta trama de corrupción en torno al empresario de la noche del mismo nombre. El Alto Tribunal recuerda a Florit que, si ve indicios contra los aforados Penalva y Subirán, debe elevar una exposición razonada (un detallado informe fundamentado) ante ellos y no mandar un simple oficio o un auto sin fundamentar.

Florit remitió por la mañana al TSJB un oficio con un informe policial y otra documentación en soporte digital (al parecer vídeos y otros archivos) y elevó una consulta sobre si el Alto Tribunal debería investigar a Penalva y Subirán por los delitos que les atribuye la Policía, entre ellos dirigir una organización criminal, detención ilegal, amenazas, coacciones, denuncias falsas, etc.

Rechazan la competencia

Pocas horas después, la sala de lo Civil y de lo Penal rechazó el oficio y los documentos y se los devolvió a Florit, a quien recordó que es el instructor de esas pesquisas por supuesta revelación de secretos, causa que debe seguir investigando en tanto no eleve ante ellos una exposición razonada donde recoja los indicios contra Penalva y Subirán, que son aforados.

Antes, según el TSJB, Florit debería dar traslado a las partes personadas en esas diligencias por revelación de secretos para que éstas expresen su opinión sobre si la causa debe ser instruida por la sala de lo Civil y de lo Penal. El Alto Tribunal también destaca que contra la hipotética decisión de Florit de inhibirse en favor de la sala de lo Civil y de lo Penal cabría recurso ante la Audiencia de Palma.

Florit en su oficio había aceptado la petición del fiscal anticorrupción Juan Carrau de dar traslado al TSJB del informe de la Policía Judicial donde se atribuyen a Penalva y Subirán los delitos de dirección de grupo criminal, revelación de secretos, amenazas, coacciones, denuncia falsa, prevaricación, detención ilegal y omisión del deber de perseguir delitos.

La Policía Judicial atribuye a los dos aforados esos delitos tras analizar unos chats telefónicos donde participaban ambos y agentes del Grupo de Blanqueo de Capitales, la unidad que ha investigado a Cursach. El contenido de esos foros se ha conocido tras el análisis de los teléfonos móviles y dispositivos electrónicos de dos de los antiguos componentes de Blanqueo de Capitales, detenidos el pasado diciembre bajo la acusación de difundir a la prensa información reservadadifundir a la prensa información reservada del caso Cursach.

Carrau no pidió la imputación

El fiscal anticorrupción Juan Carrau se mostró partidario de enviar al TSJB el informe de la Policía Judicial, pero no apoyó expresamente la solicitud de que se investigue a su compañero de la fiscalía anticorrupción Subirán y al exinstructor del caso Cursach.

El juez Florit dictó el miércoles un auto por el que acordó un testimonio al TSJB "a modo de exposición razonada". Según el Alto Tribunal, el actual instructor del caso Cursah apenas utilizó dos líneas para exponer las razones por las que se debería imputar a Penalva y Florit, que "no cumplen, ni de lejos, los requisitos" que el Supremo ha marcado para las exposiciones razonadas.

El fiscal Subirán ha presentado una denuncia por revelación de secretos del informe policial sobre él.

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