El presidente de la patronal PIMEM y de la Fundació per a la Formació i Recerca, Jordi Mora, anunció ayer que en esta última entidad se van a "producir cambios" después de que la Inspección la haya sancionado por la contratación fraudulenta de jóvenes en formación, tal y como ha adelantado Diario de Mallorca. Mora se desvinculó personalmente de los hechos denunciados, alegando que aunque ocupa la presidencia del patronato no está presente en su funcionamiento diario, pero admitió el informe negativo de la Inspección laboral y que se ha pagado la sanción correspondiente.

Preguntado sobre si él va a asumir la responsabilidad de lo sucedido, como presidente, o éstas se van a depurar a nivel interno analizando la autoría de los hechos fraudulentos, Jordi Mora anunció que se va a "valorar con calma lo ocurrido y a tomar decisiones" y que "durante las próximas semanas se van a producir cambios" en la fundación.

Como ha informado este diario, la sanción de la Inspección a la citada entidad se produjo por hacerse con los servicios de una decena de jóvenes con contratos de formación, con las ventajas que ello supone para el empresario, cuando en realidad las labores que se les encargaban de lunes a jueves eran de sustitución de trabajadores ordinarios, como hacer fotocopias, y solo los viernes se les ofrecían enseñanzas teóricas sobre confección y publicación de páginas web. Esta formación dual estaba subvencionada por el servicio balear de empleo (SOIB), aunque finalmente no se abonaron las ayudas.