Apaga es llum, tanca s'aixeta i surt en es carrer a defensar sa roqueta; Aquest calor no és ni mig normal; Hi ha més plàstic que sentit comú o Volem plaques solars als nostres terrats: estos son algunos de los muchos y orginales lemas que coreaban esta mañana un grupo de estudiantes de la Universitat mientras marchaban por el campus para reivindicar una UIB más sostenible.

Unos 40 estudiantes han respondido a la llamada de EcoUIB, el movimiento estudiantil surgido hace unos meses al calor del discurso de la joven activista sueca Greta Thunberg y las iniciativas de alumnos surgidas en todo el mundo para exigir acciones decididas contra el cambio climático, los Friday for the Future. El 15 de marzo impulsaron la huelga y la manifestación de estudiantes en Palma y hoy, viernes, han realizado una marcha desde la estación de metro hasta Son Lledó, el edificio del rectorado.

Una vez allí, los jóvenes han gritado exigiendo la presencia del rector, Llorenç Huguet, para darle a conocer sus propuestas para que la UIB se convierta en un "referente de sostenibilidad".

"Nos encontramos en una situación de emergencia ecológica mundial y autonómica", han argumentado, "para conseguir un cambio de paradigma hemos de pensar global y actual local". Y como comunidad universitaria, su ámbito más cercano son sin duda las instalaciones de la Universitat.

Huguet ha bajado a escuchar las peticiones del colectivo, que en cuanto a movilidad ponen la diana en un problema histórico: el uso abusivo del transporte privado para llegar a la UIB. Reclaman "presionar para mejorar la red de transporte público, especialmente en lo que se refiere a la comunicación con la Part Forana" ; promover el uso de coche compartido y el alquiler de bicicletas y limitar la circulación de vehículos y aparcamientos potenciando la peatonalización del campus.

Sobre este punto, el rector ha reconocido que existe un problema de abuso del coche privado que desde hace años se trata de reducir y ha indicado que cuando se inaugure el nuevo edificio para ciencias de la salud la intención es limitar más la circulación y ampliar la zona peatonal existente. "El campus de Alicante es nuestro referente", ha asegurado a los estudiantes.

Los alumnos han reclamado que se optimice la gestión del agua y se minimicen posibles pérdidas instalando grifos con rosca y cisternas con doble pulsador. Asimismo, piden mejorar la recogida de aguas pluviales, recuperar y proteger la zona húmeda del campus y sensibilizar sobre riesgos de verter por los fregadores de los laboratorios según qué productos.

La generación de residuos es otro tema que desde EcoUIB creen que se podría mejorar, por ejemplo exigiendo a las empresas que gestionan las cafeterías de las facultades el uso de materiales reutilizables como requisito para lograr el concurso. También proponen fijar un punto de préstamo y retorno de envases como fiambreras o tazas de café, además de continuar favoreciendo y promoviendo la reducción y el reciclaje.

También tienen propuestas sobre el consumo de energía y su apuesta es potenciar el autoconsumo instalando placas solares en los edificios y en las zonas de parking sin vegetación. Aspiran a que el campus pueda autoabastecerse al 100%, pero mientras que no sea posible solicitan contratar el suministro eléctrico con empresas que garanticen su origen "100% renovable y que funcionen con crtierios sociales y de sostenibilidad". Han puesto de ejemplo al ayuntamiento de Madrid. Además, ven imprescindible adoptar medidas para reducir el consumo, controlando los sistemas de calefacción y refrigeración y aislando de forma adecuada los edificios. En este sentido, Huguet ha desvelado que en el Anselm Turmeda ya se ha confeccionado un estudio de eficiencia energética.

Por último, los estudiantes han solicitado incorporar la educación ambiental como competencia transversal de todos los planes de estudio, algo que el rector ha indicado que sería posible ofreciéndola en un primer momento como materia optativa.

Llorenç Huguet les ha animado a continuar la lucha y ha mostrado su intención de estudiar sus propuestas: "Hay cosas posibles". Asimismo, les ha recordado que la UIB cuenta desde el año pasado con el Laboratorio Interdisciplinar contra el Cambio Climático (LICC).

Los alumnos han reconocido que la Universitat ha dado pasos, como el proyecto SmartUIB o Campus saludable i Sostenible, pero los consideran insuficientes y reivindican por ello que sus "exigencias constructivas se apliquen urgentemente". Los estudiantes tienen pensado realizar actividades un viernes sí y uno no y confían en ir sumando más integrantes a la causa. Su manifiesto de hoy ha concluido con esta llamada a la acción: "No podemos esperar a mañana, de hecho, ¡hoy ya es demasiado tarde!".