Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Por qué esconde su nombre para escribir de Cabrera?"

No sé contestar, cogí otro nombre para tener paz y que no relacionaran mi trabajo académico con la novela. No soy historiadora, y he sacado un libro de Historia sin sentirme especialista en el periodo napoleónico.

Fuimos los carceleros de Napoleón.

No lo fuisteis. Los carceleros eran la Junta Central española y los ingleses. A los mallorquines les fueron impuestos en 1809 los soldados de Napoleón, por el riesgo de enfermedades que aceleró su salida de Cádiz, y ni siquiera les abonaron las cantidades pactadas.

Sabíamos de los cinco mil soldados napoleónicos en Cabrera, no de las 21 mujeres que les acompañaban.

El sacerdote Damià Estelrich hizo una lista de las 21, las quería fuera de Cabrera. Eran cantineras con licencia, casadas con soldados porque Napoleón no quería putas. Se colocaban bajo la protección de hombres para no ser violadas.

Cinco mil a 21 garantiza el conflicto.

Las presas en Cabrera eran objetos de lujo que se podían vender. Los soldados se sorteaban pasar las noches con ellas. Las monedas utilizadas eran habas.

¿Existió la Héloïsse de Cabrera que narra en 'La prisionera del mar'?

Está basada en la vida de una de las cantineras, todos los nombres que aparecen en el libro corresponden a mujeres presas en la isla. Héloïsse es una cantinera viuda. Violada en Cabrera, busca la protección de Henri, teniente cirujano. Después se enamora de otro prisionero recién llegado. La prisionera del mar narra el primer año de la mujer en la isla.

Los supervivientes dijeron que las mujeres de Cabrera "parecían menos abatidas".

Ayudaban a nivel psicológico con los enfermos. Eran más activas, y una mujer siempre muestra mayor fortaleza de ánimo. Tal vez en el hospital disfrutaban de doble ración, como los enfermos. Y en Cabrera también había hijos de las cautivas, nacidos en el barco.

¿Cabrera conserva el eco de los miles de prisioneros?

Pasaron por allí once mil prisioneros de las diversas nacionalidades integradas en las tropas napoleónicas. Nunca bajaron de cinco mil, entre muertos, huidos o desertores al bando español. He leído muchísimas de sus memorias y, cuando hoy subo al castillo que sirvió de hospital, siento escalofríos porque sé lo que pasó.

Vuelve usted al pasado.

En Cabrera no veo una isla bonita, veo la desesperación. Veo a personas caminando con los pies desnudos sobre piedras afiladas, sin agua suficiente y sin una sombra donde protegerse del sol inclemente.

¿Cabrera fue un antecedente de los campos

Ese término no existía en 1809, nace con la guerra de los boers. Sin embargo, lo ocurrido se corresponde con la definición de campo de concentración que encontramos en el diccionario Larousse. Un crítico de La prisionera del mar ha calificado a Cabrera como "la primera experiencia concentracionaria de la Historia".

Fayard no es una editorial al alcance de cualquiera.

Cada año convocan un premio para novelistas debutantes, en su Mazarine Book Day. El certamen se celebra ante un tribunal compuesto por un editor, un bloguero y un librero. Participan dos centenares de obras, y se publican un par de ellas. La prisionera del mar resultó elegida.

¿Conserva Mallorca su atractivo decimonónico?

El paisaje sigue siendo su mayor atractivo, y los mallorquines son acogedores con los turistas, todo lo contrario de lo que ocurre en la Costa Azul francesa.

George Sand creía que Mallorca mató a Chopin.

George Sand quería venir a Mallorca sin Chopin, pero el compositor se sumó. Su estado iba de mal en peor en Valldemossa, por culpa de una enfermedad de bronquios que se veía agravada por la humedad. Y al apartarlos como si tuvieran la peste, no podían querer a los mallorquines.

¿Miente más la Historia que la Literatura?

Antes que nada soy una filóloga, intrigada por la Historia que siempre es Literatura, porque expone la perspectiva de alguien. El punto de vista histórico no es objetivo, supone siempre un grado de subjetividad.

¿El francés tiene alguna posibilidad?

Desafortunadamente y a mi parecer, el inglés prevalecerá cada vez más sobre el francés, que perderá difusión en el mundo por culpa de la globalización. Intentamos fomentarlo y sigue siendo el idioma diplomático y de la Unión Europea pero, ¿por cuánto tiempo?