La autopista de Inca sufre un atasco de cinco kilómetros entre Binissalem y la capital de es Raiguer. El motivo del colapso son unas obras que han reducido los carriles a uno.

El embotellamiento se ha iniciado desde primera hora de la mañana. Aunque el tráfico no se ha llegado a cortar, las retenciones han alcanzado proporciones kilométricas debido a la reducción de carriles.

Por fortuna el otro sentido de la autopista de Inca, hacia Palma, no se ha visto afectado por estas obras. De lo contrario, el colapso había sido mayúsculo al coincidir con la hora punta y la entrada de cientos de vehículos a la capital balear.