La asociación balear de máquinas recreativas con premio (Acomam) ha denunciado públicamente, tras la asamblea celebrada el pasado miércoles, el caos que están viviendo sus empresas debido a los enormes retrasos que se registran en las tramitaciones que se realizan ante el Servicio de Juego de las islas, una situación de la que responsabilizan a la jefa de este departamento, María Cañellas, a la que califican de incompetente y culpan de haber generado una situación "insostenible" y la "peor" en la historia del sector.

El presidente de Acomam, Guillem Coll, defiende el trabajo realizado por los funcionarios del citado servicio y delimita la responsabilidad de lo sucedido a la jefa de Juego, a la que acusa de las demoras que se están dando, y que implican esperar de dos a tres meses para una simple autorización para el traslado de una máquina con premio de un bar a otro, por citar un ejemplo, y con algunos casos en los que los expedientes están pendientes de resolución desde hace un año.

Según los datos facilitados por esta patronal, Cañellas revisa personalmente todos los trámites y solicitudes que entran en el Servicio de Juego, algo que provoca esas demoras y que se interpreta como una falta de confianza en el personal funcionario de este departamento.

Guillem Coll destaca que el colapso que se ha generado es tan grave que ha provocado la indignación tanto de las empresas de su sector como de los fabricantes de máquinas con premio, que ven frenadas sus ventas, y de los establecimientos de restauración a las que éstas deberían llegar, al verse obligados a esperar meses.

En este aspecto, recuerda que en otras comunidades estas autorizaciones son automáticas, y posteriormente se revisa si se han cumplido todos los requisitos pertinentes.

Coll añade que recientemente se mantuvo una reunión con la directora general de Empresa, Pilar Sansó, de la que depende ese servicio, y asegura que ésta se comprometió a tener el problema resuelto al cierre del presente mes, algo que el presidente de Acomam califica de "imposible" debido a las dimensiones que han alcanzado las demoras, al tiempo que pronostica que ni a finales de año la situación actual habrá quedado paliada.

Por ello, y para hacer frente a este problema, la citada patronal exige que intervenga la Inspección de Calidad de la Comunitat Autònoma para que analice la situación del Servicio de Juego y las mejoras que se puede aplicar, al tiempo que va a encargar a sus servicios jurídicos que estudien si la actuación del citado departamento se ajusta al código de conducta que rige la actuación de los empleados públicos, entre otras propuestas.