? Més vive entre el alivio y la euforia el archivo del caso Contratos. La decisión judicial llega como agua de mayo en las filas ecosoberanistas para dar el pistoletazo de salida a las dos campañas electorales que hay por delante, en un momento en que ya daban por hecho que deberían soportar la losa de las imputaciones de sus excargos hasta después de pasar por las urnas. "Tenemos el contador de corrupción a cero", celebró ayer por la tarde visiblemente satisfecha la coordinadora del partido y vicepresidenta y consellera de Turismo del Govern, Bel Busquets.

El sobreseimiento por parte del juez de la causa que investigaba los contratos a dedo desde varias consellerias de Més al que fue su estratega electoral, Jaume Garau, se tradujo ayer en un día de llamadas y chats de WhatsApp echando humo entre los mandos de Més, a cada cual más satisfecho. No obstante, el mensaje de la cúpula es sacar pecho lo justo y poner el acento en la respuesta dada ahora hará dos años cuando estalló el escándalo. "Tomamos una decisión política como nunca", valoró ayer Busquets: "Fue una respuesta ejemplar", quiso recalcar.

"No todos somos iguales"

"Hoy es una día de alegría, estamos muy satisfechos con esta noticia, que demuestra que la gente de Més es honesta y que trabaja para el país, que es mentira eso de que todos somos iguales", destacó la líder ecosoberanista.

"Se demuestra que los trabajos pagados estaban justificados y fueron útiles para la sociedad", consideró Busquets sobre los encargos a su jefe de campaña. La coordinadora del partido confesó que entre las llamadas que se produjeron ayer, a la hora de hacer las declaraciones, todavía no había habido ninguna entre el partido y Jaume Garau, hoy ya fuera de la formación, ni entre el partido y Pere Muñoz.