El Servei de Salut facturó el año pasado un total de 51.058.976 euros por los asistencias prestadas a terceros -aseguradoras privadas, accidentes de tráfico, mutuas-, y a los turistas comunitarios que tuvieron algún problema de salud durante sus estancias y contaban con la preceptiva tarjeta sanitaria europea, según datos facilitados por este departamento.

Estas últimas asistencias suponen seis de cada diez euros facturados (el 62,01% del total, 31,6 millones) y, por nacionalidades, los turistas de Reino Unido (16.555 facturadas libradas a ese país), Alemania (13.200), Italia (11.293) y Francia (5.377) fueron los que más prestaciones sanitarias necesitaron.

La cifra total supone un 16% de incremento respecto a la facturación emitida el ejercicio precedente, cuando se pasaron a cobro un total de 43.994.359 euros. Y desglosado, el incremento fue de un 11,95% respecto de las facturas libradas a terceros -19, 3 millones en 2018 frente a los 17,3 del año anterior- y de un 18,7% en lo que a facturación a turistas se refiere, ya a que estos se libraron el año pasado facturas por el citado monto total de 31,6 millones que crecieron 4,9 frente a los 26,6 de 2017.

Por islas, Mallorca libró facturas por un total de 38.078.177 euros, 15,7 millones de ellos por cargos a terceros y los 22,2 restantes por asistencias a turistas.

En el caso de Eivissa y Formentera se facturaron un total de 9,6 millones, 2,7 por el primer concepto y 6,8 por la asistencia directa a visitantes con tarjeta sanitaria europea. Por último, en Menorca se generaron unos gastos por estas asistencias de 3,3 millones, 867.251 de ellos por tráficos, mutuas y seguros privados y 2,4 por atenciones a turistas.

De las 4 islas, Mallorca es en la que creció más la facturación porcentualmente, un 16,2%, al pasar de los 32,7 millones facturados en 2017 a los 38 del año pasado. A continuación le siguen las Pitiüses, donde las facturas crecieron un 15,6% (9,6 millones de euros frente a los 8,3 del ejercicio precedente) y cierra la lista Menorca, isla en la que se facturaron 402.623 euros más que en el año 2017 (13,7%) cuando se pasó al cobro un total de 2,93 millones.

Son Espases, 4 de cada 10

Por centros sanitarios donde se generaron más facturas por ambos conceptos, lógicamente Son EspasesEn el hospital de referencia se generaron 20,6 millones, cuatro de cada diez euros de los 51millones facturados el año pasado.

Tras Son Espases figura Can Misses, hospital de referencia ibicenco donde se facturaron 6,5 millones, el 12,8% del total. Y en tercer lugar se situó el comarcal de Manacor, sorprendentemente por delante de ManacorSon Llàtzer. Esta circunstancia cabría atribuirla a las asistencias a los turistas estivales en la comarca del Llevant, hospital en el que se libraron cargos por un monto total de 4,6 millones, el 9,1% del total, y 519.217 euros por encima de la facturación del hospital palmesano que atiende a la población del Migjorn de la isla, centro que libró 4,1 millones, el 8,1% de la factura total.

Por lo que respecta a la facturación por centros por la asistencia a turistas comunitarios, la clasificación es idéntica a la de la facturación global excepto en la cuarta posición en la que la Gerencia de Atención Primaria (GAP) de Mallorca, los centros de salud de esta isla, superan a Son Llàtzer. Aunque por poco margen.

Y es que las facturas presentadas por asistencias a personas en los hospitales públicos son mucho más elevadas que las de Atención Primaria. Así, tomando como referencia el número de facturas y las cuantías consignadas en ellas de los cuatro hospitales que más cargos libraron -Son Espases,Can Misses, Manacor y Son Llàtzer- y comparándolas con las de la GAP Mallorca, el importe medio de una cuenta hospitalaria asciende a 1.360 euros frente a los 130 euros de promedio que se cargó por cada asistencia en un centro de salud.

Al seguro pese a tener tarjeta

Por último, en lo que atañe a la facturación a terceros, desde el Servei de Salut confirmaron que cuando una persona con tarjeta sanitaria de su titularidad en vigor sufre un accidente de tráfico y a consecuencia del mismo es atendido en un centro sanitario público, los gastos derivados de esa asistencia son facturados a las compañías de seguros del coche. Por este concepto el año pasado se facturaron algo más de 5 millones de euros. Asimismo, el IB-Salutque ha optado por una mutualidad son también cargados a esta última.

Tres asistencias a visitantes mayores de cien años

En la vorágine de datos y cifras que encierran las facturaciones internacionales y a terceros del Servei de Salut siempre se esconde alguna curiosidad. Y en esta ocasión es que el año pasado se atendieron a tres turistas que ya habían cumplido los cien años, asistencias que generaron una factura de 6.718 euros, algo más de 2.200 euros por cabeza.

Por tramos de edad de los comunitarios atendidos, el que generó más asistencias fue el comprendido entre los 70 y los 79 años con el 17,68% del total y 7.543 facturas de las 57.590 emitidas.

Que los niños son revoltosos y, por tanto, proclives a tener accidentes lo demuestra el hecho de que un 7,12% de las asistencias realizadas a turistas comunitarios (6.855 en números absolutos) los tuvieron como protagonistas.

Un chipriota

En lo que respecta a las nacionalidades atendidas, también resulta curioso que el año pasado se asistiera a un único paciente procedente de Chipre. Y previsiblemente acudió a un centro de salud en virtud de la cuantía de la factura librada por esa asistencia, 151 euros (ver texto principal).

Entre otras nacionalidades "raras" atendidas por el IB-Salut cabe destacar los 4 naturales de Liechtenstein, los 12 croatas o los 13 malteses. Asimismo, por la asistencia a 33 chilenos, nación que debe tener firmado algún convenio de asistencia mutua con la española, se libraron cargos por valor de 38.641 euros. Por último, volviendo a las nacionalidades más atendidas, llama la atención que tras británicos, alemanes, italianos y franceses ya figuren a continuación los holandeses (1.728 asistencias) y los suecos (1.392).